Neymar ya es jugador del PSG. El jugador brasileño se ha convertido en el fichaje más caro de la historia tras firmar un contrato por cinco temporadas con el club francés. Un acuerdo por el que percibirá en torno a 30 millones por temporada.El jugador, a través del abogado Juan de Dios Crespo, se ha dirigido este jueves por la mañana a LaLiga para depositar la cláusula de rescisión que le liberará para firmar por el PSG. Sin embargo, por órdenes del presidente, Javier Tebas, no se ha aceptado el pago de los 222 millones de euros. Tebas, actualmente de vacaciones en Santo Domingo, advirtió este miércoles en 'As' que "si el PSG llega con el dinero no se aceptará". Dicho y hecho. La cosa fue más sencilla cuando, por la tarde, acudieron a las oficinas del propio club, que no puso más problema en recibir el dinero y comunicó que el brasileño se había desvinculado definitivamente. Anuncian, eso sí, que irán a la UEFA para determinar posibles irregularidades en la operación.
El Confidencial se puso en contacto con LaLiga para saber los motivos de tal rechazo, pero no ha encontrado respuesta. Una portavoz confirma que han rechazado el cheque, pero no da los motivos de esa decisión. Tebas, en esa charla con el diario deportivo, explicó que diría "no" por el 'fair play' financiero. Esta decisión, ¿es cometido de LaLiga? Juan de Dios Crespo, después de estar 10 minutos en la sede de la competición nacional, salió con el rostro molesto y con cierta incredulidad por lo acontecido.
Javier Tebas argumenta que todo es cuestión del Fair Play Financiero, pero en todo caso es difícil de entender que sea su institución la que tiene competencias a ese respecto. El mercado internacional de traspasos está regulado por la FIFA por medio del TMS (transfer matching sistem), un sistema en el que se registran las altas y las bajas en el mercado futbolístico. Es la FIFA la que tiene una serie de normas referidas al Fair Play Financiero creadas, en buena medida, para aminorar el poder que pueden tener los jeques en el panorama mundial del deporte.
De hecho los dos únicos clubes que han sido sancionados por saltarse los preceptos del Fair Play han sido el PSG y el Manchester City. Ahora bien, los análisis sobre las situaciones financieras y la legalidad o no de los balances deben de hacerse en periodos concretos y no tienen nada que ver con un solo movimiento como es el caso de Neymar. Al final el Fair Play busca que los presupuestos estén equilibrados y del mismo modo que el club francés puede desembolsar 222 millones de euros por el brasileño, también pueden recaudar un buen dinero por ventas de sus estrellas que les permita no incurrir en problemas con este precepto.
Hay una paradoja mayor en todo esto, pues el propio club, el Barcelona, emitió un comunicado el día anterior diciendo que solo aceptarían la marcha de Neymar del club si el PSG depositaba la cláusula de rescisión. Y eso hicieron los franceses, pero con poco éxito de momento, pues en Hernández de Tejada, la sede de La Liga, no han aceptado siquiera el único requisito que puso el club para permitir la salida del brasileño.
Y así fue. El club recibió por la tarde a los abogados del brasileño. Llevaba el mismo cheque que, por la mañana, habían tratado de depositar en La Liga. El Barcelona simplemente lo aceptó y, con ese gesto, resolvió el contrato. Neymar ya es jugador del PSG.
FUENTE: Con información de GONZALO CABEZA - ROBERTO R. BALLESTEROS - https://www.elconfidencial.com
