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domingo, 3 de junio de 2018

(España) El PP dejará solo a Sánchez en el techo de gasto y "mejorará" los PGE en el Senado

El Partido Popular está dispuesto a “mejorar” el proyecto de Presupuestos Generales del Estado en el trámite de enmiendas del Senado y dejará solo al nuevo Gobierno de Pedro Sánchez en su primer reto serio: aprobar el techo de gasto para el próximo año. Esas son las dos primeras respuestas del PP para remarcar su peso en las Cortes, muy superior frente al Ejecutivo con menos apoyos que ha conocido la democracia española y el único que se constituye sin ganar en la urnas, según recalcan sus dirigentes.

El Grupo Popular pedirá este lunes en la Cámara Alta una prórroga para el periodo de enmiendas parciales y se tomará el tiempo que estime oportuno para preparar una serie de “mejoras” en varias secciones de las cuentas del Estado. La mayoría absoluta del PP en el Senado permite variar el calendario, esperar a que Sánchez nombre a sus ministros y estudiar la ‘reasignación’ de partidas en los distintos ministerios.

Fuentes del PP dan por hecho que habrá enmiendas “en positivo” y que queda por decidir en qué medida se tocan las partidas logradas por el PNV a cambio de su antiguo y efímero apoyo, cifradas en 540 millones por los propios nacionalistas. En el Senado pueden ‘aparecer’, antes del fin de semana, nuevas subidas salariales en algunos cuerpos de funcionarios, o en las Fuerzas Armadas, y dentro del Ministerio de Fomento inversiones que iban para playas de Guipúzcoa pueden acabar “en algunas de la costa andaluza, por ejemplo”, según apuntan en los mismos medios.

Los populares no pensaban tocar el proyecto aprobado en el Congreso cuando contaban con seguir en el Gobierno, pero después de la moción de censura quieren dejar claro que son una oposición con una abrumadora ventaja parlamentaria de 134 diputados frente a 84 del PSOE. Las enmiendas parciales, que aprobará el Senado en el pleno de la semana que empieza el 19 de junio, no afectan al compromiso de Mariano Rajoy de respetar los Presupuestos.

Pero Sánchez tendrá que elegir después en el Congreso si vota con el PP para admitir las enmiendas introducidas en la Cámara Alta o recurre al conglomerado de grupos parlamentarios que le han hecho presidente (podemitas, independentistas, nacionalistas y Bildu) para rechazarlas y dejar de todos modos el proyecto como lo dejó Cristóbal Montoro en la última semana de mayo. En ningún caso corren riesgo los Presupuestos, pero Sánchez queda en evidencia en cualquier supuesto, que es el objetivo del PP.

Los socialistas que votaron en contra de los Presupuestos en el Congreso en mayo, y todavía lo hacen en junio en los primeros trámites del Senado, tendrán que defenderlos a finales de mes en la Cámara Baja para quedar bien con el PNV y, al mismo tiempo, chocarán con las exigencias de Pablo Iglesias. Ese espectáculo queda para un pleno de cierre de periodo de sesiones que será el retrato de la nueva etapa de la legislatura.

A falta de la decisión última sobre las partidas concretas que puede perder el PNV, fuentes del Grupo Popular confirman que Sánchez se tendrá que buscar los apoyos para fijar el techo de gasto con sus aliados o en Ciudadanos. Albert Rivera ya planeaba antes de la moción de censura bloquear al Gobierno de Rajoy con la negativa a apoyar ese cuadro macroeconómico que es un paso previo para elaborar los Presupuestos y examen obligado ante Bruselas.

Los mismos medios apuntan a la importancia que tendrá en esa pugna la figura del futuro ministro de Economía o de Hacienda (según la estructura que fije el gabinete de Sánchez), para ver cómo puede conjugar Sánchez los intereses y posiciones de sus socios izquierdistas y populistas y los del propio PSOE.

FUENTE: Con información de ÁNGEL COLLADO - https://www.elconfidencial.com - (PULSE AQUÍ)

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