Baltasar Garzón se ofreció al expresidente del FC Barcelona Sandro Rosell, en prisión desde que fue detenido en mayo de 2017 en la operación Rimet, para conseguir que la Audiencia Nacional lo dejara por fin en libertad condicional. El acercamiento se produjo el pasado junio, solo unos días después de que la fiscal Dolores Delgado, amiga íntima de Garzón, fuera nombrada por Pedro Sánchez nueva ministra de Justicia. El bufete que dirige la defensa de Rosell desde el inicio de la causa, Molins & Silva, aceptó la oferta y dejó que el exmagistrado asumiera la pieza de situación personal, en la que se dirimen las medidas cautelares que se imponen a los investigados, como la prisión provisional.El acuerdo se produjo en un momento de máxima desesperación de Rosell, cuando ya había cumplido un año en Soto del Real y había visto cómo la Audiencia Nacional tumbaba más de una decena de peticiones para quedar en libertad. La última negativa se había producido apenas unos días antes, el 23 de mayo. La Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional dictaminó nuevamente que concurría un riesgo de fuga “altamente probable” por sus “fuertes vínculos y contactos personales y económicos en el extranjero, pues su actividad profesional la realizaba mayoritariamente fuera de España”. A esa situación se sumaba el embargo de todos sus bienes. Su defensa ha llegado a decir públicamente que su mujer, Marta Pineda, también investigada, vive de la “caridad” desde que estalló el caso.
El antiguo juez estrella, cuya cercanía a la nueva ministra de Justicia es ampliamente conocida, apareció entonces en el camino de Rosell como el único letrado capaz de encontrarle una salida. Tras el ofrecimiento, uno de los letrados de su despacho, el exfiscal de la Audiencia Nacional Juan Barallat, acudió a ese mismo órgano judicial para comunicar que se había hecho cargo de la defensa de Rosell en lo relativo a la pieza de situación personal y anticipar que en breve presentaría una nueva petición de libertad del dirigente 'blaugrana', según aseguran a El Confidencial fuentes jurídicas.
Se trata de una maniobra absolutamente extraña en el mundo de la abogacía. Lo habitual es que la pieza de situación personal sea dirigida por los mismos letrados que llevan el resto del procedimiento. Pero, ante el desasosiego que le producía la posibilidad de seguir más tiempo en la cárcel, Rosell optó por confiarle específicamente a Garzón las gestiones relacionadas con su libertad, explican las mismas fuentes.
Un salto en la causa impidió que ese paso llegara a producirse. El 29 de junio, la instructora del caso Rimet, la jueza Carmen Lamela, acordó el procesamiento de Rosell y de cinco colaboradores —entre ellos, su mujer— por los delitos de integración en organización criminal y blanqueo de capitales, al considerar indiciariamente acreditado que participaron en el lavado de comisiones por valor de 20 millones de euros de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF). La Fiscalía pide 11 años de cárcel para el expresidente del Barça.
A partir de ese momento, la implicación del despacho de Garzón (Ilocad) en la defensa de Rosell quedó suspendida. Está a la espera de que se fije la fecha de inicio de la vista oral. Si el comienzo del juicio es inminente, no llegará a producirse un nuevo recurso contra la prisión ante las escasas probabilidades de que prospere por el duro horizonte penal que aguarda al exdirigente 'blaugrana'. En cambio, si el arranque de la vista se dilata, Garzón podría volver a entrar en escena para presentar la enésima solicitud de libertad, aseguran las fuentes jurídicas consultadas.
Rosell consiguió al menos el pasado julio que la jueza Lamela autorizara su traslado de Soto del Real a la cárcel de Brians 2, en Sant Esteve Sesrovires, cerca de su domicilio en Barcelona. Un portavoz del despacho Molins & Silva ha asegurado a preguntas de El Confidencial que en estos momentos ni el exmagistrado “ni nadie de su despacho forma parte del equipo de defensa actual de Sandro Rosell”. “La única dirección letrada del caso Rosell es la que ostenta, desde el inicio y hasta la fecha, el despacho Molins - Defensa Penal”, subraya.
La relación entre Garzón y Delgado está precisamente en el foco de una pieza secreta de la operación Tándem. Como adelantó El Confidencial, los agentes de Asuntos Internos de la Policía Nacional encontraron en poder de José Manuel Villarejo unas notas manuscritas que indicaban una cita con 'Dos', nombre en clave con el que el comisario se refería a la ministra de Justicia. También apareció abundante material en el que se refiere al exjuez como 'M' o 'el Mago'.
Los investigadores sospechan que los apuntes están relacionados con unos pagos que recibió Villarejo del naviero Ángel Pérez-Maura. Este lo habría contratado para frustrar una petición de extradición cursada por Guatemala, donde se le acusa de haber pagado hasta 30 millones de dólares en sobornos al expresidente del país Otto Pérez Molina para adjudicarse fraudulentamente la construcción y gestión durante 25 años de una terminal de contenedores en Quetzal, en la costa del Pacífico. Como también desveló El Confidencial, una parte de los fondos que Villarejo recibió de Pérez-Maura habrían sido trasvasados posteriormente a cuentas de Garzón.
Rosell también tiene otros frentes abiertos. El pasado martes, tuvo que declarar como investigado por un delito fiscal, tras ser acusado de defraudar 229.569 euros en 2012 con su declaración de la renta. Y la Fiscalía y la Abogacía del Estado han pedido a la titular del Juzgado de Instrucción número 28 de Barcelona que reabran la investigación sobre la presunta “compra de un hígado ilegal” para Abidal, actual secretario técnico del club. El Confidencial desveló cuatro conversaciones telefónicas interceptadas por la Policía Nacional y la Guardia Civil en las que Rosell admitía ese presunto tráfico de órganos.
FUENTE: Con información de JOSÉ MARÍA OLMO - https://www.elconfidencial.com ->> Ir
