Mike Pompeo, secretario de Estado de Estados Unidos, llegó a Tocumen bajo un fuerte aguacero, a las 3:35 p.m. del pasado jueves. Lo recibió la vicepresidenta y canciller, Isabel de Saint Malo de Alvarado. Atravesó la ciudad en una caravana de automóviles que lo llevó en pocos minutos hasta el Palacio de las Garzas, donde lo esperaban el mandatario Juan Carlos Varela y otros funcionarios del gobierno.Pompeo no llegó solo. Como ya es costumbre en sus travesías, lo acompañó una batería de periodistas de Washington, que también ingresó al palacio.
Por espacio de 50 minutos, Varela y Pompeo hablaron. Con ellos estaba la vicepresidenta, la ministra de Economía y Finanzas, Eyda Varela de Chinchilla, y el embajador de Panamá en Estados Unidos, Emanuel González- Revilla.
Por parte de la delegación estadounidense estuvo Kimberly Breier, subsecretaria para el hemisferio occidental del Departamento de Estado; Roxanne Cabral, encargada de negocios de la Embajada en Panamá, y Thomas Brechbuhl, asesor del secretario de Estado.
En varias ocasiones, Varela y Pompeo se asomaron al balcón presidencial. Los dos solos. Desde ahí saludaron a los periodistas de medios locales y agencias de noticias que aguardaban frente a la Presidencia. No hubo declaraciones a los medios y Pompeo se retiró como llegó: en silencio y sonriente.
Poco después, a las 6:17 p.m., la Secretaría de Comunicación del Estado divulgó un comunicado para informar que en la reunión se habló de seguridad, particularmente “del intercambio de experiencias y buenas prácticas para el manejo de flujos migratorios irregulares, lucha contra el narcotráfico y otras modalidades del crimen organizado”. También de Nicaragua y Venezuela.
A esa hora, Pompeo estaba en la embajada estadounidense en Clayton. Ahí dio una entrevista a TVN y contó que una de las razones de su visita fue advertir a Panamá que “tengan los ojos bien abiertos cuando se trata de la inversión de China en el país y la región”.
Nada en el boletín de la Secretaría de Comunicación indicaba que ese tema había sido abordado en el encuentro. Posteriormente, Pompeo se encargaría de ampliar los detalles.
Pompeo confirma
En el avión que lo transportaba a México, Pompeo sostuvo una conversación con los periodistas que estuvieron con él en la Presidencia y aportó más detalles de su reunión con Varela.
Confirmó que China fue parte de la conversación. “Tuvimos la oportunidad de hablar con medios locales y reiterarle a toda la región que cuando China viene llamando a la puerta, no siempre es por el bienestar de sus ciudadanos, y que cuando se acercan con una inversión directa, legítima, que sea transparente y acorde con la ley, eso es competencia y es algo a lo que Estados Unidos le da la bienvenida. Pero cuando se aparecen con propuestas que son muy buenas para ser ciertas, es usual que ese sea el caso. Tuvimos una buena conversación acerca de ese tema también”, informó Pompeo, según una transcripción oficial del coloquio que sostuvo con los periodistas a bordo, publicada por el Departamento de Estado en su sitio en internet.
Estas declaraciones fueron recogidas, entre otros, por el diario The New York Times, que informó sobre las “advertencias” de Pompeo a Varela, respecto a las actividades económicas de China.
El Gobierno se resiste
Ayer, en horas de la mañana, el embajador de Panamá en Washington, Emanuel González-Revilla, pareció restar credibilidad al tema. “En la reunión en la que estuve yo, no se habló del tema de China”, dijo en Telemetro Reporta.
Varela, en el transcurso de la mañana de ayer, escribió dos tuits sobre Pompeo. El primero a las 10:55 a.m., en el que dijo que los esfuerzos para la restauración de la democracia en Nicaragua y Venezuela, así como los esfuerzos anticorrupción del gobierno, fueron reconocidos por Pompeo.
A las 11:41 a.m. volvió a escribir para informar que el secretario estadounidense reconoció los avances económicos y sociales de Panamá. Todavía nada de China.
En la tarde, en un acto público en el residencial Altos de los Lagos, en Colón, Varela finalmente reconoció que sí habló de China con Pompeo, pero en privado, cuando recorrían la “residencia presidencial”, que es como se denomina a los aposentos del gobernante y su familia en el Palacio de las Garzas.
Varela aseguró que Pompeo le expresó que Panamá era un ejemplo para la región por la forma en que lleva sus asuntos con China. Negó que se le advirtiera sobre el peligro de las relaciones con China, aunque reconoció que eso ha sido una preocupación ya expresada con anterioridad por funcionarios estadounidenses, como lo muestra el hecho de que, precisamente por este tema, Roxanne Cabral fue llamada a “consultas” en Washington, en septiembre pasado.
Se preguntó a la Secretaría de Comunicación por qué en su comunicado no informó de la conversación sobre China, pero nunca ofreció una explicación al respecto.
En las redes sociales circularon memes del encuentro entre el mandatario panameño y el secretario de Estado de EEUU.
FUENTE: Agencias
