Por: Daniel Coronell - Es un alfil de Álvaro Uribe. Bajo su ala ha aspirado a ser gobernador del
Cauca, senador por el Centro Democrático, fue miembro de la comisión de
empalme del sector defensa cuando Iván Duque era presidente electo y resultó
favorecido con contratos del Ministerio del Interior que empezaron con la
primera ministra de este gobierno, Nancy Patricia Gutiérrez, y siguieron con
su sucesora Alicia Arango. En el gobierno de Juan Manuel Santos, el general
Leonardo Barrero alcanzó el más alto grado al que puede aspirar un oficial
del Ejército y también llegó al mayor cargo en la línea de mando: comandante
general de las Fuerzas Militares.
Esta semana la periodista Sylvia Charry de Blu Radio reveló la existencia de
una investigación judicial que señala los presuntos vínculos del general
retirado con la banda narcotraficante La Cordillera, uno de los tentáculos
del Cartel del Golfo. El informe identifica a Barrero con el alias de “el
Padrino”.
No es el único indicio de la conexión del general Leonardo Barrero con las
mafias del narcotráfico y el paramilitarismo. Dairo Antonio Úsuga, alias
Otoniel, contó que el alto oficial estuvo a sueldo de la organización
criminal y en alianza con los paramilitares en Urabá, en Córdoba y en
Casanare.
Según la declaración de Otoniel, Barrero lleva décadas trabajando para los
grupos criminales, desde cuando era teniente coronel y comandante de
batallón. Le pagaban para que facilitara el narcotráfico, la minería ilegal,
el tráfico de personas y también la acción de los paramilitares. Este es uno
de los testimonios reservados que entregó Otoniel ante la Jurisdicción
Especial de Paz, JEP. Ustedes pueden ver más de lo que dijo –y de lo que
tiene nerviosos a tantos—en el artículo de Cambio “¿Quién le teme a
Otoniel?”.
En febrero de 2014 el general Leonardo Barrero salió por la puerta de atrás
del Comando General de las Fuerzas Militares, que ocupó apenas por 6 meses,
190 días para ser exacto. Lo sacaron cuando el periodista Ricardo Calderón
publicó una conversación del general Barrero con el corrupto y asesino
teniente coronel Robinson González del Río, también presuntamente vinculado
a la banda La Cordillera. El general le recomendaba al delincuente para
evadir la justicia:
—Ah bueno, entonces ya tomó contacto con Sigifredo. Haga una mafia para
denunciar fiscales y toda esa guevonada.
Sin embargo, el general Barrero saltó del desprestigio a los brazos del
expresidente Álvaro Uribe. En las elecciones de 2015 fue el candidato del
Centro Democrático a la Gobernación del Cauca, por el expresidente Uribe en
el video que ustedes pueden ver en Los Danieles.
Barrero quien se presentaba como “Tropero con corazón” pensaba que el Cauca tenía que estarle muy agradecido por su participación en un intento por dividir a los indígenas. El Comité Regional Indígena del Cauca (Cric) fue sorprendido con la súbita aparición de una asociación llamada Organización Pluricultural de los Indígenas de Colombia (Opic). El inolvidable columnista Alfredo Molano Bravo definió la Opic como “una organización de esquiroles y paniaguados creada por Uribe y su ministro Valencia Cossio”. El tercer autor intelectual fue el general Barrero.
No ganó la gobernación, obtuvo menos del 11 por ciento de la votación, pero al amparo de Uribe entró a la lista del Centro Democrático al Senado. ->>Vea más...
FUENTE: Artículo de Opinión – Los Danieles