En este gigantesco lienzo, diez metros por seis, conservado en el Louvre, la catedral es irreconocible. En cualquier caso, apenas lo vemos, tanto la composición general de la coronación de Napoleón por el pintor Jacques-Louis David (1748-1825) se extiende hacia la exaltación del emperador, coronando a su esposa Josephine bajo La bendición del Papa Pío VII. Pero, ¿cuáles son los mármoles falsos y los tapices, agregados para la ceremonia de coronación del emperador francés en Notre-Dame en París, el 2 de diciembre de 1804? Es que para celebrar con dignidad su adhesión al trono de Francia, el ganador de Arcole y Marengo quería que fuera preparado a su gusto. Incluso el techo de la venerable XIII ª siglo, elevado 33 metros sobre el vacío, había sido cubierto con un velo para la ocasión.En su pintura, el artista comisionado por el Emperador para inmortalizar este momento ha agregado personajes e inventado algunos detalles, pero para el resto, apenas ha embellecido la escena. A juzgar pésimo, obsoleta y en un estado deplorable de conservación, Nuestra Señora de París, no era presentable para un parisino temprana XIX XX siglo. Los maestros de la ceremonia habían usado la catedral como decoración, ciertamente, pero se habían "inventado" todo lo posible.
Al elegir esta catedral en lugar de su coronación, en lugar de la de Reims , donde los capetianos estaban tradicionalmente entronizados, en memoria del bautismo de Clovis, el nuevo monarca hizo una clara elección, lo que indica que no había ninguna cuestión de regresar Al antiguo régimen. Por otro lado, ha adoptado un lugar tradicional, íntimamente vinculado a la historia de una ciudad, París, con la que sueña en el centro de un imperio universal.
Salvado por la destrucción.
Menos importante políticamente que la basílica de Saint-Denis y más disperso que Notre-Dame de Chartres, que representa el estilo gótico en su perfección, Notre-Dame tiene para ella su armonía y equilibrio, que siempre lo han considerado como "el Catedral gótica por excelencia. Además, esta iglesia está construida en medio de la Ile de la Cité, considerada como el corazón histórico de París y, por lo tanto, de toda Francia. Básicamente, esta representación simbólica no ha desaparecido del todo: el patio de la catedral aún no aparece hoy en día el "punto cero" a partir del cual se calcula el kilometraje de todas las carreteras nacionales .
FUENTE: Con información de Le Monde
