Paella
En primer lugar, no podía faltar uno de los platos de la gastronomía española más conocidos en todo el mundo, una receta que muchos extranjeros saben chapurrear pese a desconocer nuestro idioma. Y es que la paella es un clásico del patrimonio culinario del país. Sin ir más lejos, su auténtica elaboración fue protegida con una denominación de origen y la Conselleria de Agricultura de la Comunidad Valenciana declaró cuál es la lista de ingredientes oficiales y básicos que no pueden faltar, aunque se aceptan variedades. Estos son el aceite, el pollo, el conejo, las judías ferraura o bajoqueta, el garrofó, el tomate, el agua, la sal, el azafrán y el arroz con D.O. de Valencia. Y por supuesto, se realiza en una paellera.
El resultado es un plato donde el arroz queda entero, suelto y sin agua -que no significa que esté seco-, y que puede tener socarrat, la parte inferior que acaba tostada para ser algo más crujiente y aportar un contraste de sabores y texturas. Para hacer una paella perfecta, en Alimente ya contamos en un artículo cuáles son las reglas básicas y los mejores trucos para realizarla.
Negro
En las costas del Mediterráneo, particularmente en la zona de Cataluña, el arroz negro es uno de los platos con mayor protagonismo. Este destaca por un característico color negro, conseguido gracias a la tinta natural de los calamares, los cuales forman parte indispensable de la receta. La sepia y las gambas completan los alimentos procedentes del mar que se utilizan para el sofrito, junto a algunos vegetales como la cebolla y el ajo. El resultado es una elaboración con mucho sabor a mar y una textura más suelta y seca que la de un caldoso. Este arroz también se puede acompañar con alioli, que se coloca en un bol aparte a la hora de servirlo para aquellos que quieren dar un contraste adicional al plato.
FUENTE: Con información de Sergio Gómez - https://www.alimente.elconfidencial.com ->> Ir