Los muros forman parte de la cancha inka del Kusicancha, y desde la mañana presentaron pintas de color anaranjado.
Al realizar la inspección se constató que de los 66 metros lineales de muro, 52 son de factura inca y 14 metros corresponden a elementos líticos reutilizados.
Según testimonio de los vecinos, al parecer los autores de este atentado contra el patrimonio cultural serían jóvenes que salieron de una discoteca que funciona en esa zona.
El arqueólogo Carlos Silva Gonzales, la arquitecta Lourdes Rosell Bocanegra y el abogado Julio Cesar Segovia, integrantes del grupo de retenes que monitorean el casco monumental, informaron que es la segunda vez que se reporta un atentado de esta naturaleza.
Los especialistas afirmaron que esta clase de pintas genera en ocasiones consecuencias irreparables pues los elementos químicos que contiene el spray de pintura, dañan la pátina de las piedras y ocasionan la degradación de la misma.
El director regional de Cultura, David Ugarte Vega Centeno, dispuso que inmediatamente se realice la denuncia ante la fiscalía de turno y la Policía Nacional, para que se efectúen las investigaciones y se impongan las sanciones según corresponda.
Del mismo modo, el equipo profesional del laboratorio químico de la Dirección de Investigación y Catastro procedió a realizar la limpieza de los muros incas dañados por irresponsables.
FUENTE: Agencia Andina
