“Cualquiera que anota como hijo propio a un chico que no es propio está cometiendo un delito”, recordó De Carlotto en una entrevista al diario español El País.
“En el caso de Guido”, el nombre que la hija de Carlotto, Laura, dio al niño al nacer antes de ser asesinada, “tendrá que ver la inocencia por su cultura, la situación, el patrón… esos son atenuantes”.
De Carlotto recordó que en este caso se trata de peones de campo, donde “es común entregar a los chicos”. “A este matrimonio alguien, el patrón, le trajo el bebé. Les dijo: tomen, ustedes que no tienen hijo, y nunca le digan que no son los padres”, añadió.
“Yo, si se comprueba la inocencia en cuanto a no dimensionar que anotarlo era delito, porque eran gente sin cultura, no los condeno”, señaló. “Pero también hay un fundamento: lo criaron bien, con amor”, señaló. “Mi posición es ésa, pero la Justicia no va a decir lo que yo digo, va a hacer lo que corresponde”, concluyó.
La noticia de la recuperación del nieto de la titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, se confirmó el pasado 5 de agosto durante una conferencia de prensa, después de que el joven se realizara voluntariamente el examen de ADN.
Guido fue buscado por su abuela, Estela, desde hace 37 años, pero fue él quien acudió a la justicia porque tenía dudas sobre su identidad y creía que podía ser alguno de los nietos desaparecidos durante la dictadura argentina, como finalmente las pruebas genéticas confirmaron.
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