
Hacienda remitió una notificación al FC Barcelona en febrero de 2016 sobre el inicio de actuaciones de comprobación e inspección relativas a numerosos impuestos y periodos. En concreto, al Impuesto sobre Sociedades de las temporadas 2011/12, 2012/13 y 2013/14 y al Impuesto sobre el Valor Añadido del periodo comprendido entre enero 2012 y diciembre 2014. Además, le advirtió sobre potenciales irregularidades de las retenciones y los ingresos a cuenta del capital mobiliario y a las retenciones sobre los rendimientos del trabajo (los sueldos de los jugadores y los empleados); a cuenta de los arrendamientos inmobiliarios y sobre los impuestos a los no residentes del periodo comprendido entre enero 2012 y diciembre 2014.
En noviembre de 2016, la Agencia Tributaria amplió la extensión de su inspección al Impuesto sobre Sociedades de la temporada 2014/15, al IVA de entre enero y junio 2015, a las retenciones a cuenta de la imposición a no residentes y sobre los rendimientos del trabajo del citado periodo. El ajuste se debió al cambio de la fiscalidad de los agentes e intermediarios que participan en los fichajes de los futbolistas, que anteriormente pasaban a los clubes una factura por la que se abonaba el IVA. Pero desde 2015, Hacienda cambió el criterio y consideró que estos pagos formaban parte de la retribución del jugador, por lo que en lugar de tributar al 21% debía hacerse al 52%.
La Junta Directiva del Club, conjuntamente con sus asesores fiscales, consideran que la provisión registrada el 30 de junio de 2018 -algo más de 14 millones de euros- es suficiente para hacer frente a los pasivos que se puedan derivar de las actas de disconformidad. ->>Vea más...
FUENTE: Con información de AGUSTÍN MARCO - https://www.elconfidencial.com