Alza en matrícula universitaria prepagada en el Sur de la Florida

Con más de 1.4 millones de planes vendidos, el programa de matrícula prepagada de la Florida es sin duda alguna el medio más popular para que las familias ahorren para gastos universitarios en el futuro.
El período de inscripción está ahora en su pleno apogeo y se espera que miles de familias compren contratos prepagados hasta la fecha tope, el 31 de enero.
Pero los planes no son baratos. Hace cinco años, el pago anticipado de cuatro años de educación universitaria en una institución estatal en una suma única costaba $11,717. Este año el mismo plan cuesta $49,293. Y eso no incluye otros gastos, como albergue, aunque los padres pueden comprar un plan prepagado para ello si así lo desean.

“Me quedé de una pieza”, dijo Kelly Carrasco-King, madre del sur de Miami-Dade que ya tenía un plan estaba estudiando comprar otro para un hijo recién nacido.

Aunque un plan prepagado puede reducir considerablemente los costos universitarios, ciertamente no significa pagar la educación del futuro a precios de hoy. Un contrato prepagado cuesta mucho más que la matrícula de hoy: el plan de $49,293 por cuatro años de estudio es más de doble de la matrícula de hoy, que es de unos $22,700.

Los que compran el plan apuestan a que en 18 años la matrícula costará más de $50,000 y posiblemente más de $100,000, lo que convertiría los $49,293 del plan en una ganga. A las familias también las atrae la garantía del estado de que su inversión es segura.

El costo abrumador de los planes prepagados en la Florida son el resultado directo de alza imparable de la matricula en las escuelas estatales. Las universidades de la Florida están entre las más accesibles del país, pero en años recientes han sido afectadas por grandes reducciones de presupuesto de parte del estado. Una de las formas en que compensan ese déficit el aumento anual del 15 por ciento que aprueban todos los años.

Pero incluso así, la matrícula en la Florida es más barata que el promedio nacional: el estado ocupa el lugar 45, aunque ha aumentado tres lugares en comparación con el año pasado.

Al fijar los precios de los planes prepagados, las autoridades de la Florida tienen que calcular lo que costará dentro de 18 años. Y como la tendencia de 15 por ciento de aumento anual no da señales de control, los planes prepagados deben fijar precios mucho más elevados para asegurar que el programa pueda pagar sus obligaciones a futuro.

Si se asume que la matrícula aumenta a razón de 7 por ciento anual —menos de la mitad de la tendencia actual de 15 por ciento— entonces no cabe duda de que sin el programa prepagado los niños de ahora tendrían que pagar más $85,000 por cuatro años de estudio en una universidad estatal para el momento en que se gradúen.

En ese caso, el precio prepagado de $49,293 es mucho menor.

Pero ¿qué sucede si el aumento de la matrícula baja de ritmo y dentro de 18 años es menos de $49,293? En ese caso, el plan no es un buen negocio. La página de información financiera bankrate.com destacó esa posibilidad en un artículo año pasado en que criticó los planes prepagados y usó la Florida como ejemplo. Los autores concluyeron que un aumento de matrícula menor de lo esperado pudiera convertir el plan en una “inversión perdedora” en que uno paga más que el costo futuro y además lo tiene que desembolsillar ahora.

Esto ha desalentado a algunos padres de comprar ahora. El año pasado se vendieron 38,567 planes, que ligeramente más que en el 2010, fue mucho menos que los 47,494 vendidos hace cinco años.

El pago del plan en cuotas mensuales (en vez de un pago único) es una forma en que las familias hacen frente al costo de los estudios universitarios, pero los pagos mensuales tienen una desventaja: un interés anual de 3.95 por ciento, lo que hace aumentar el precio a $64,346 si se financia a 18 años.

Aunque las familias pueden sentirse abrumadas por el aumento del costo, todavía es posible hacerlo. Opciones menos costosas son:

• En vez de pagar por adelantado cuatro años de estudios universitarios, contemple la posibilidad de comprar un plan para un colegio comunitario, que cuesta mucho menos. Para un recién nacido, estos planes cuestan sólo un poco más de $8,000, que pueden saldarse a razón de pagos mensuales de $48.73 durante los próximos 18 años. Estos planes son mucho más económicos porque la matrícula en las instituciones universitarias comunitarias es menos costosas y aumenta a un ritmo menor que las universidades estatales.

El pago adelantado de dos años de estudio en una institución comunitaria no significa que su hijo tiene que asistir a uno de esos recintos, porque pueden usarse en cualquier escuela acreditada, pública o privada. Si la escuela que usted escoge cuesta más que un colegio comunitario de la Florida, el plan contribuye una cantidad igual a la matrícula de esa escuela, y el estudiante tiene que pagar la diferencia.

• Los planes 529 son otra buena opción: no están garantizados por el estado y por lo tanto están sujetos a los riesgos del mercado, pero los padres pueden estructurar su plan de manera que cuando el menor crezca más dinero se invierte en opciones más seguras como certificados de depósito.

Aunque la Florida ofrece un plan 529, las familias no tienen que invertir en ese específico: usted puede escoger entre los planes de otros estados y escoger el que le guste. Una consideración importante es escoger un plan 529 con bajos cargos administrativos.

En caso que su plan 529 funcione bien, pudiera generar potencialmente más en ahorros que un plan prepagado, y a diferencia de éstos, las familias con frecuencia pueden escoger con qué frecuencia y cuánto desean contribuir.

Esa mayor flexibilidad también se extiende a cómo se puede gastar un plan 529, porque se pueden usar para pagar libros y otros gastos educativos que los planes prepagados no cubren.

El experto en asistencia financiera Mark Kantrowitz es un firme creyente en los planes 529 y dice que las familias pueden “tener un falso sentido de seguridad” en los planes prepagados al no saber que el estadio tiene cierta flexibilidad contractual. Los planes prepagados de la Florida indican que si las autoridades estatales consideran el programa “no viable” entonces sólo los beneficiarios de 13 años o más pueden cobrar el valor total de la matrícula cuando se inscriban. Los beneficiarios más jóvenes recibirían un reembolso con intereses.

Kantrowitz agrega que los planes 529 en muchos casos pueden superar a los planes prepagados.

FUENTE: Michael Vasquez - http://www.elnuevoherald.com