Según el Organismo de Investigación Judicial (OIJ), que realizó la operación, la aeronave provenía de Guatemala y su propósito era regresar a este país en una escala hacia su destino final, México.
Entre los seis detenidos, cuya identidad no fue revelada, están el piloto, que es mexicano, y el copiloto, de nacionalidad costarricense. Otras dos personas se encuentran en fuga.
El OIJ indicó que, tras aterrizar, de la aeronave bajaron un saco y una caja con el dinero, que aún está siendo contabilizado, y se disponían a cargar la droga cuando fueron interceptados por los agentes de la policía judicial.
Tras un seguimiento de dos meses, los agentes del OIJ determinaron que el aeropuerto privado era utilizado sin el conocimiento de sus propietarios para trasladar drogas hacia otros países y abastecerse de combustible.
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