Tal aseveración surgió luego que el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, anunciara este lunes la suspensión temporal de los diálogos de paz tras la presunta desaparición del general colombiano Rubén Darío Alzate, del cabo primero Jorge Rodríguez Contreras y la abogada Gloria Urrego, asesora de proyectos especiales del Ejército.
El mandatario también ordenó la suspensión del viaje de la delegación de su país este lunes a una nueva ronda de negociaciones en La Habana, Cuba, hasta tanto se aclaren los hechos, ocurridos este domingo en Las Mercedes, zona rural de Quibdó (Chocó).
Al respecto, Córdoba manifestó, durante una entrevista concedida a Telesur, que "esta no es una decisión única y exclusivamente de quienes están sentados en La Habana, esta es una circunstancia ética y política que además que toca a toda la sociedad, que le muestra a la sociedad colombiana realmente lo beneficioso de la paz".
Añadió que "es todavía inexplicable que en Colombia, a pesar de tantos años de guerra, de los costos de la guerra en vidas humanas, lo que ha significado el paramilitarismo, las desapariciones y las ejecuciones extrajudiciales, no creamos que ya es hora de terminar el conflicto".
Asimismo, recalcó que "el llamado tiene que ser a la ponderación, a la tranquilidad, un balance positivo y propositivo de lo que queremos lograr y alcanzar, pero fundamentalmente de que este proceso nos pertenece a los colombianos".
Comentó que el cese bilateral de fuego "permite a la sociedad colombiana apreciar la importancia y el avance de este proceso de diálogos en La Habana", como la protección de la vida de muchos civiles "que se ven impactados realmente por lo que significa este conflicto".
"Aunque el Gobierno nacional considere que tiene bajo su potestad decir que no está de acuerdo con el cese bilateral del fuego, desde la sociedad muchos les decimos que es un imperativo ético lograr ese cese del fuego y fundamentalmente lograr un acuerdo humanitario".
Córdoba indicó, además, que este miércoles se realizará una movilización en las ciudades del país neogranadino para decir que la continuidad de las conversaciones de paz "es un imperativo ético".
A la fecha, las Farc-EP y el Gobierno de Colombia han alcanzado tres acuerdos parciales en materia de desarrollo agrario integral, participación política y el problema de las drogas ilícitas, que fueron publicados para el conocimiento de todos los colombianos.
En tanto, mantienen conversaciones sobre las víctimas del conflicto que se sucede desde hace más de 50 años.
| FUENTE: AVN |
