
La información fue filtrada a “Crítica” por una fuente ligada a operaciones de inteligencia, que señaló que la investigación era conocida bajo el nombre clave de “Rastro Verde” y tenía como potenciales blanco a figuras de alto poder económico y muchas conexiones.
Alex Cedeño, condecorado cuatro veces por el actual gobierno y una vez por Colombia por capturar a David Murcia Guzmán, fue dado de baja en una extraña junta disciplinaria la noche del 3 de noviembre al vincularlo a presuntas irregularidades en operativos antidrogas y denigrar la buena imagen de la Policía, pero luego se le dejó en libertad.
Un antiguo oficial recordó que uno de los integrantes de la junta disciplinaria también había sido investigado anteriormente por un caso de drogas e incluso a uno de los altos cargos de la seguridad también se le investigó en la época de Gustavo Pérez por la fuga del conocido delincuente “Ito”.
Liberan a todos los subalternos de Cedeño
Ayer dos subtenientes, un sargento, dos cabos y un agente que formaban parte de la Unidad de Asuntos de Frontera jefaturada por Cedeño, fueron enviados a sus casas sin que se les haya realizado junta disciplinaria.
Pero los integrantes de esa unidad sensitiva fueron asignados a labores administrativas bajo las órdenes del director de Ingeniería e Infraestructura de la Policía Nacional, Juan Cerezo, hasta que se concluyan las investigaciones de la Dirección de Responsabilidad Profesional a cargo del mayor Basilio Sánchez.
Cedeño y sus subalternos a los que hoy se pretende pintar como corruptos, eran sometidos a pruebas de polígrafos por agentes de la CIA, como requisito para integrar ese grupo élite.
El 24 de octubre, el mayor Cedeño y su grupo vigilaban un hangar en Llano Bonito donde se sospechaba que existía un cargamento de drogas, cuando de repente irrumpió la gente de los comisionados Rolando López Pérez y de Bolívar Medina, incautando 100 kilos de cocaína y luego se arrestó a los integrantes de la Unidad de Frontera.
Al irrumpir las unidades del Consejo de Seguridad, también se impidió conocer quién retiraría los 100 kilos de cocaína.
El tema ha generado inquietud en las filas de la Policía. Ya el director de Inteligencia Policial y superior de Cedeño, el comisionado José María Huertas fue reemplazado en esa posición por el comisionado Alonso Vega Pino.
El mandatario Juan Carlos Varela tocó ayer en Colón muy por encima el tema del mayor Cedeño.
Para un comisionado jubilado, el asunto huele a un “sainete”. En la Policía hay mucha “tirria y puñales” y no es normal que se convoque a una junta disciplinaria nocturna y se destituya sumarialmente a un oficial, agregó.
Al exministro de Gobierno Renato Pereira no le cuadra que a uno de los oficiales más condecorados de la Policía se le pretenda presentar como un corrupto. Cedeño era como un emblema de los estamentos de seguridad y me huelo algo muy feo en todo, estimó el también comentarista.
En enero de 1995 se anunció un plan que involucraba a 10 policías que, supuestamente, pretendían matar al mandatario Ernesto Pérez Balladares, pero a la larga se descubrió que todo fue un montaje y los involucrados permanecieron en sus cargos.
En el caso del mayor Alex Cedeño todavía hay mucha tela por cortar. Este redactor no mete la mano en el fuego por él, pero con su perfil y trayectoria, se me hace difícil aceptar que sea un torcido, a menos que existan pruebas contundentes que demuestren lo contrario.
FUENTE: Juan Pritsiolas - http://www.critica.com.pa