
Lo mismo ha ocurrido con alimentos ricos en grasa, como los quesos, aunque ahora estos gozan de un periodo en el que, gracias a los defensores de la dieta keto, sus supuestos beneficios son mayores que sus perjuicios. Ahora, un nuevo estudio presentado durante el Congreso de la Sociedad Europea de Cardiología el día 28 de agosto, y realizado por la Universidad McMaster de Hamilton, en Canadá, dice que las recomendaciones de autoridades sanitarias como la Organización Mundial de la Salud (OMS) o el NHS (servicio nacional de salud británico) acerca del consumo máximo saludable de carne roja y queso graso eran erróneas. De hecho, lo que dice es que podemos comer más del doble.
El NHS tiene establecidas unas ingestas máximas de productos lácteos y carne roja que considera seguras. En los últimos 12 años, estas se han reducido considerablemente, hasta donde están hoy: los lácteos solo deberían suponer el 8% de la ingesta calórica diaria y el consumo de carne roja no debería superar en ningún caso los 70 gramos diarios. En España, el consumo medio diario de este producto, según datos de la Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición (AECOSAN), es de 116 gramos diarios, un 65% más.
La buena noticia es que, como explica el profesor Salum Yusuf, uno de los autores del mencionado estudio y director del Population Health Research Institute de la McMaster University, “lo que creemos que es una dieta saludable para la población general tiene que ser reconsiderado. Por ejemplo, nuestros resultados muestran que los productos lácteos grasos y la carne roja son beneficiosos para la salud cardíaca y para la longevidad, lo que difiere de los ‘saludables’ estándares nutricionales actuales”. Que un reputado científico diga que, tal vez, comer más carne roja y queso no solo no es malo, sino que podría suponer beneficios para nuestra salud es de lo más raro. ->>Continuar leyendo...
FUENTE: Con información de Álvaro Hermida - https://www.alimente.elconfidencial.com ->> Ir