
El sector mira ahora con lupa el papel de Gortari en la crisis que afronta BBVA tras conocerse que González ordenó una operación de macroespionaje en 2004, con la ayuda de Villarejo, para desactivar el asalto al banco del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero y la constructora Sacyr. Precisamente uno de los últimos nombramientos que hizo González antes de dejar la presidencia de la entidad el pasado 20 de diciembre, tras 18 años de mandato ininterrumpido, fue el de Gortari al frente de la Dirección General de Auditoría Interna. La elección no fue casual.
Durante los últimos ocho años, este directivo de 53 años, licenciado en Derecho por la Universidad de Navarra, fue el hombre de mayor confianza de González. Tras ocupar la dirección adjunta al consejero delegado y la dirección financiera de la filial en Estados Unidos, el máximo ejecutivo de la entidad decidió convertirlo en 2010 en su mano derecho colocándolo al frente de su propio gabinete. Con su ascenso a jefe de Auditoría Interna, González se cubrió las espaldas justo antes de pasar a ocupar puestos honoríficos no ejecutivos en la entidad y en su fundación. ->>Vea más...
FUENTE: Con información de JOSÉ MARÍA OLMO - https://www.elconfidencial.com