Así lo dejó saber ayer en la tarde el jurista Julio Berríos después de sostener una reunión con el ex hombre fuerte de Panamá en el interior del centro de rehabilitación El Renacer, en Gamboa, durante aproximadamente 2 horas y 40 minutos, entre la 1:15 p.m. y las 3:58 p.m.
A su salida de El Renacer, Berríos confirmó que, en efecto, se reunió con Noriega y que este “está bien”.
Además, bromeó con los medios de comunicación, que según él lo despidieron de su trabajo el pasado domingo. “Aunque los medios me botaron sigo siendo parte de la defensa del general”, afirmó.
Berríos estuvo acompañado de otro supuesto abogado que no quiso identificarse y que tampoco dio declaraciones a los medios de comunicación que los esperaban a las afueras del penal. Después, en una conversación privada con este diario, Berríos ratificó que Noriega les pidió guardar silencio, y advirtió que “el cliente es el que manda”. Y no dijo más nada.
Los otros integrantes del equipo de defensores de Noriega son Lorena Noriega, Gisela Vega y Ramón Arosemena.
Mientras tanto, al cumplirse 48 horas de la reclusión de Noriega en El Renacer, el Comité de Familiares de Desaparecidos Héctor Gallego rechazó ayer “los privilegios” dados a Noriega en el operativo para su traslado a la cárcel y dentro de esta, y exigió al Estado el respeto de los derechos humanos de los familiares de las víctimas y desaparecidos durante la dictadura militar, que suman más de 100 según la Comisión de la Verdad.
Maritza Maestre, de este comité, informó que hoy miércoles se reunirán con autoridades de la Cancillería para reactivar la mesa de entendimiento y exigir la reparación económica y moral de las familias de las víctimas.
Al mismo tiempo, confirmó que miembros de la Asociación de Antropólogos de Argentina vendrán a Panamá para trabajar en el proceso de identificación de los más de 60 restos humanos hallados por la Comisión de la Verdad.
ESPALDARAZO
En la contraparte, el militar retirado Enrique Arrocha Rubio, que se dijo amigo de Noriega, acudió ayer a El Renacer para entregar una carta al exdictador, en la que le dio la bienvenida y pidió al Gobierno que se le garanticen sus derechos humanos y se le juzgue sin ningún tipo de saña ni intervención política.
A juicio de Arrocha, que finalmente no pudo entrar al centro penitenciario, Noriega ya pagó sus condenas en Estados Unidos y Francia.
Al mismo tiempo solicitó al Ejecutivo que reclame a su homólogo estadounidense las más de 15 mil cajas de información que fueron confiscadas por el ejército de ese país en la invasión de 1989, en las cuales, según él, está la verdad de la dictadura.
Sostuvo que es necesario que haya un proceso de reconciliación en el país para que puedan sanar las heridas dejadas por el régimen militar, en el que, denunció, hubo uniformados que persiguieron a título personal.
RECLUSIÓN
Y tras cumplir su segunda noche en prisión, Noriega no ha presentado ningún tipo de problema médico y tampoco se ha visto alterado el orden interno de El Renacer por su permanencia allí.
Fuentes del Sistema Penitenciario confirmaron que el exdictador fue sometido ayer en la mañana a revisiones por parte de médicos del servicio de salud penitenciaria, con miras a determinar qué tipo de medicamentos necesita para controlar los padecimientos que sufre y fijarle una dieta en función de aquellos. Además, que ya concluyó el proceso de su registro a través del programa informático conocido como biomecol, en el que cada preso del país tiene una numeración y registro de sus generales y prontuario.
Por otra parte, por segundo día consecutivo este diario solicitó al departamento de Relaciones Públicas de la Policía Nacional una entrevista formal con el director de esa entidad, Gustavo Pérez, para que aportara detalles sobre el operativo de seguridad desplegado durante el traslado de Noriega desde el aeropuerto de Tocumen hasta el El Renacer, y cuya logística, según el ministro de Seguridad Pública, José Raúl Mulino, recayó sobre dos especialistas de la Unidad de Fuerzas Especiales de la Policía Nacional. Pero no hubo respuestas.
Además, se solicitó a la Policía copia del video que tomó un camarógrafo de esa entidad durante la llegada de Noriega al penal el pasado domingo, pero tampoco se respondió a esa solicitud.
Este medio acudió ayer en horas de la mañana a la sede de la Policía Nacional en Ancón, y estuvo por más de dos horas esperando respuestas, pero se informó que el jefe de Relaciones Públicas, Jahiro Polo, no estaba en la institución y era el único autorizado para dar el video y la entrevista.
(Con información de Juan Díaz, José Otero y Rubén Polanco).
FUENTE: http://www.prensa.com
