Me dirijo a ustedes para declarar que entregaré las riendas del poder al Sheikh Tamim bin Hamad Al Thani en la certeza de que está a la altura de la responsabilidad, merece confianza y es capaz de (...) cumplir la misión, dijo el Emir, de 61 años, vestido con el atuendo tradicional de los beduinos.
En realidad la decisión era conocida de manera extraoficial desde la víspera, cuando el monarca reunió a la familia real y a notables del país para comunicárselas.
El nuevo monarca comenzará hoy un proceso, de alrededor de 48 horas, durante el cual se reunirá con los súbditos más prominentes, discutirá el futuro y expondrá sus planes para el pequeño, pero rico emirato devenido un país moderno bajo el mando de su progenitor, asistido por su madre, Mozah bint Nasser, de 54 años.
Dios Todopoderoso sabe que no he deseado el poder por el poder, ni me he propuesto gobernar por motivos personales, sino que siempre ha sido por el bien de la Nación y ese interés ha dictado que comencemos otro capítulo, dijo el Emir, quien tomó el poder en 1995 cuando su progenitor estaba en el extranjero.
El nuevo monarca es el delfín aparente desde 2003, cuando su hermano mayor no mostró interés en los asuntos del Estado, y ha asumido funciones estratégicas tales como comandante de las Fuerzas Armadas; además preside el Comité Olímpico Nacional.
Asimismo encabeza el ente encargado de organizar la Copa mundial de la FIFA en 2022, una liza en cuya celebración Catar pone grandes esperanzas para promover a su país como eje comercial y financiero del mundo.
Su padre deja la Corona después de haber transformado a su país de un estado minúsculo reverberante bajo el sol inclemente de la península Arábiga en un país pujante cuya capital, es objeto de asombro para los visitantes por su modernidad y en el cual los súbditos disfrutan de amplios beneficios sanitarios y educativos.
FUENTE: Prensa Latina |