El analfabetismo, entendido como: la imposibilidad de leer y escribir, se extiende como una oscura nube sobre la faz del planeta, sumiendo en la mayor ignorancia a poco más de 870 millones de seres humanos, quienes de acuerdo con la la Organización de las Naciones Unidas para la Ciencia y La Cultura (UNESCO), no saben leer ni escribir.
De esta enorme cifra las mujeres constituyen el 57,47%, es decir, cerca de 500 millones.
A esto habría que añadir que 67 millones de niños en edad escolar, no asisten a la escuela , y que 72 millones de adolescentes que podrían acudir a la primera etapa de la educación secundaria, tampoco lo hacen.
El analfabetismo es quizá una de las más importantes causas de exclusión, pues margina al ser humano del aprovechamiento de los servicios, bienes y oportunidades materiales que les ofrece la realidad y, lo que es peor, en el mundo de hoy, los priva de muchas posibilidades de desarrollo intelectual y crecimiento espiritual.
El 51,8% del analfabetismo en el mundo, se encuentra asentado en los países del sur y el suroeste asiático; un 21,4% en el África subsahariana; 12,8% en el Asia oriental y el Pacífico; 7,6% en los países árabes, 4,6% en América Latina y el Caribe, y un 2% en América del norte y Europa central.
El capitalismo actúa siempre impelido por su afán de lucro y por la dinámica de sobre explotación de recursos bien sean humanos o materiales. Ajeno a sus objetivos está el desarrollo del ser humano, que queda en manos del azar y de la irracionalidad.
FUENTE: Aurelio Gil Beroes - AVN |