Al analizar los mensajes que se enviaron Pistorius y Steenkamp, Nel describió a un hombre celoso y egocéntrico, que jamás reconocía su responsabilidad. El atleta mantuvo la calma, después de haber llorado y vomitado en varias oportunidades en los últimos días. «En una relación de cuatro meses, cuando la relación se volvía más intensa, él la trataba mal, pedía excusas, sonreía», resumió el fiscal.
Al volver sobre sus disputas en los mensajes de sus teléfonos, Nel mostró que Pistorius no hacía más que humillar a su novia, interesándose únicamente en sí mismo y en su propia imagen. Según el fical, ella sufría, se quejaba, luego él pedía perdón, antes de hacerle otros reproches, a veces en público. «'¡No hagas esto, no hagas lo otro!' Usted era lo único importante. ¡Lo que era importante para ella, para usted no tenía importancia!», aseguró el fiscal.
«Ella hacía todo para hacerlo feliz, para hacer feliz a Oscar. ¿No le importa?», le preguntó Nel a Pistorius en un momento del interrogatorio. «Eso no es cierto, señoría», respondió Pistorius, dirigiéndose a la jueza Thokozile Masipa. «Lo único importante era Pistorius. Así era su relación», afirmó Nel aunque el atleta nego que fuera cierto.
El atleta explicó que como era constantemente seguido por los medios de comunicación, él le daba consejos a su novia para no cometer errores en público, y que no se podía explicar toda una relación a partir de algunos mensajes. «Yo quería que solucionáramos eso. Yo quería que funcionara. Yo quería que tuviéramos una relación amorosa», explicó Pistorius.
Sin embargo, esta explicación no fue suficiente para Nel ya que «en su respuesta, usted ni siquiera le dice que la ama». Pistorius respondió que jamás le había dicho a una mujer que la amaba por SMS. «Yo jamás tuve la ocasión de decirle a Reeva que la amaba», reconoció, emocionado, pocos minutos antes, cuando el fiscal señaló que los numerosos mensajes intercambiados por la pareja jamás hablaban de amor.
Pistorius acusa a la Policía de alterar las pruebas
El atleta sudafricano, por su parte, acusó a la Policía de cambiar objetos de sitio en su dormitorio antes de hacer las fotografías utilizadas como prueba en el caso y que contradicen su versión de los hechos. Pistorius aseguró que se cambió la situación de un ventilador para ponerlo frente a la puerta del balcón del dormitorio, en lugar de en el interior del mismo -donde el velocista dice que lo había dejado- cuando los peritos clasificaban las pruebas tras el crimen. Peritos policiales aceptaron ya durante el juicio haber cambiado algunos objetos de sitio durante el interrogatorio del abogado de la defensa, Barry Roux.
El «milagro» del disparo en el restaurante
El fiscal rescató para continuar con el interrogatorio un incidente ocurrido en enero del 2013 en un restaurante repleto de gente en Johannesburgo, donde el atleta disparó la pistola de un amigo en el suelo. «Yo no apreté el gatillo», exclamó Pistorius en varias oportunidades. «Yo no tenía el dedo sobre el gatillo», agregó.
Según explicó Nel, basándose en opiniones de expertos, eso es totalmente imposible, y se burló del «milagro del disparo que parte solo». «No tuve tiempo para reflexionar», afirmó Pistorius. «Yo soy un aficionado a las armas de fuego, no tuve tiempo para reflexionar», respondió sarcásticamente Gerrie Nel.
Las palabras para explicar este incidente trajeron a la mente del fiscal la explicación que ofreció Pistorius cuando contó el miércoles como había disparado cuatro veces contra la puerta del baño detrás de la que se encontraba su novia: «Disparé antes de reflexionar», «No tuve tiempo de pensar en lo que hacía» o «Yo tenía el arma, el dedo en el gatillo, lo que ocurrió fue un accidente». «Vas a culpar a cualquiera, menos a ti», concluyó Nel.
La madre de Steenkamp asegura estar obsesionada con observar a Pistorius
Según recoge un diario británico, la madre de Reeva Steenkamp está obsesionada con observar al atleta paralímpico sudafricano en el juicio que se celebra en Johannesburgo. «Miro a Oscar todo el rato para ver como lo vive, como se comporta. Estoy obsesionada con mirarle, es instintivo, no puedo explicarlo», aseguró June Steenkamp en una entrevista publicada este jueves en el Daily Mirror.
«No paro de pensar: 'A ver cómo encaja esto'. Está dramatizando, con los vómitos y los lloros. No sé si está actuando», agregó la madre de la que era novia de Pistorius desde hacía sólo tres meses.
La madre y el atleta de 27 años no se habían conocido antes de la muerte de su hija, pero un día, en el juicio, Pistorius la miró y la saludó, explicó. «Mi presencia le pone nervioso, estoy segura», admitió ya que «debe verme en la corte, debe sentir mis ojos escrutándole».
"«Sentí su sangre corriendo sobre mí»"
Durante la jornada anterior, Pistorius mantuvo su inocencia pero se derrumbó cuando el fiscal le mostró las imágenes de su novia Reeva Steenkamp muerta. «Sentí su sangre corriendo sobre mí» aseguró el atleta cuando explicó como había encotrado a su novia.
El martes, el atleta se quitó las prótesis y mostró al tribunal cómo camina sin ellas y mostrar las dificultades que tiene para desplazarse. Asimismo, también explicó que «escuché un ruido procedente del baño, me dio la sensación de que alguien iba a salir del baño. Antes de darme cuenta, ya había efectuado cuatro disparos», contó Pistorius, rompiendo a llorar.
Asimismo, Pistorius se disculpó el lunes, durante la primera jornada de su declaración, ante la familia y amigos de Steenkamp. «Las palabras nunca serán suficientes», admitió el atleta que también explicó que siente «el olor de la sangre» cada vez que se despierta y de sufrir «terribles pesadillas».
El juicio a Pistorius arrancó el pasado 3 de marzo en el Tribunal Superior de Pretoria y está previsto que dure hasta el 16 de mayo. Al sudafricano se le acusa de matar intencionadamente a Reeva Steenkamp tras una supuesta discusión lo que podría costarle al corredor la cadena perpetua en caso de ser declarado culpable. El atleta no niega ser el autor de los disparos que acabaron con la vida de su novia el 14 de febrero de 2013, pero quiere convencer al tribunal de que lo hizo por equivocación al creer que tras la puerta cerrada del baño había un delincuente.
FUENTE: Agencias - http://www.lavozdegalicia.es |