La debacle brasileña se dio en el Estadio Mineirao en Belo Horizonte, el mismo lugar en el que perdió por última vez en casa en un torneo competitivo, en la Copa América 1975. En esa ocasión, cayeron ante Perú, por 2-0, pero nunca había perdido por seis goles desde 1920, contra Uruguay.
Luiz Felipe Scolari lideró a la selección brasileña en el Mundial de Corea/Japón 2002 a su último título de campeón del mundo hasta hoy. Doce años después los lleva a la derrota más humillante de su historia.
"Fue el peor día de mi vida, pero la vida sigue", afirmó Felipao en la conferencia de prensa después del partido. "Seré recordado, quizás, como el entrenador que perdió 7-1 contra Alemania, pero era un riesgo que yo sabía que corría cuando acepté el cargo".
Las proporciones de la derrota no se pueden cuantificar ahora para Brasil, pero sin lugar a dudas dejan un vacío muy grande en el Mundial que buscaba reivindicar al fútbol brasileño. En los encuentros anteriores de Brasil se vio a un equipo que renunció al tradicional jogo bonito y que fue superado por sus rivales futbolísticamente; sin embargo, Scolari considera que no fue tal.
"Lo que pasó hoy fue muy diferente a lo de los otros partidos. Contra México estuvimos al mismo nivel, a Chile lo llevamos hasta penaltis, y contra Colombia - uno de los equipos revelación del torneo -, les ganamos", indicó Scolaro. "Hasta los 20 minutos el partido estaba muy parejo. Esto no es normal, hubo falta de control y a pesar de que íbamos abajo 5-0 creamos opciones y buscamos anotar".
A pesar de su intento por elevar el trabajo de sus dirigidos, Scolari tomó la responsabilidad de la caída en sus manos.
"El responsable sobre quién decidió cómo jugar, el planteamiento táctico y quien escogió los jugadores, soy yo", reflexionó el seleccionador brasileño. "No tengo ninguna deuda. He hecho mi trabajo como siempre lo he hecho. Hice lo que pensé era correcto".
Posteriormente, Felipao mencionó que la ausencia de Neymar no fue contraproducente para el equipo. De la misma manera, aseguró que no hubo cómo frenar a Alemania.
"Si hicieron esto, probablemente también nos lo hubieran hecho con Neymar en la cancha", afirmó Scolari. "No tiene sentido suponer que con Neymar las cosas hubieran sido diferentes, porque él es un delantero y no hubiera podido defender".
En cuanto al futuro de la canarinha, Scolari fue categórico al asegurar que Brasil se levantará de esta debacle.
"Probablemente hasta 15 de estos jugadores estarán en el Mundial de 2018", dijo. "Este equipo de Alemania ha jugado desde el Mundial de 2010. Sí, ha sido la peor derrota de Brasil, pero tenemos que lidiar con esto".
FUENTE: Diego Pinzón - http://www.mlssoccer.com |