Aunque Estados Unidos y 11 naciones del Pacífico, entre las que se encuentran Australia, Nueva Zelanda, Brunéi, Canadá, Chile, Japón, Malasia, México, Perú, Singapur y Vietnam, firmaron el pasado 5 de octubre, este acuerdo comercial global, impulsado por el presidente norteamericano, Barack Obama, el contenido del mismo había permanecido en secreto, lo que generó numerosas críticas durante el período de negociaciones que se hicieron al margen de los ciudadanos de los países involucrados.
Wikileaks indicó que el capítulo de protección intelectual es es el más polémico y controvertido debido a su impacto en los servicios de Internet, los medicamentos, las editoriales, las libertades civiles y las patentes biológicas.
En el texto filtrado por el portal se establece que los gobiernos de los 12 países que firman el TPP acuerdan que las partes pueden formular o enmendar sus leyes y regulaciones; adoptar medidas necesarias para proteger la salud pública y la nutrición y para promover el interés público en sectores de vital importancia para su desarrollo socio económico y tecnológico, siempre que esas medidas sean consistentes con las disposiciones de este acuerdo, reseñó Telesur en su página web.
Al respecto, el director del Programa de Acceso Global a Medicamentos Peter Maybarduk, advirtió quede ratificarse el TPP, los habitantes de los países ribereños del Pacífico tendrían que vivir de acuerdo con las reglas expuestas en el documento revelado por el portal.
"Los nuevos derechos monopólicos para las grandes compañías farmacéuticas pueden comprometer el acceso a medicinas para los habitantes de los países involucrados. El ATP puede costar vidas", denunció.
Otro de los puntos del acuerdo sobre propiedad intelectual tiene que ver con la comercialización de productos químicos agrícolas, utilizados para la producción de alimentos
De este modo, si el gobierno de un país exige, como condición para aprobar la comercialización de un nuevo producto químico agrícola, la presentación de pruebas relativas a su seguridad y eficacia, debe comprometerse a no permitir por un periodo de 10 años que otras empresas puedan comercializar el mismo producto o uno de fórmula similar, a menos de que la primera compañía que presentó la solicitud lo apruebe explíctamente.
En el acuerdo también se incluyen además consideraciones acerca uso de fármacos de nueva generación para el tratamiento de enfermedades como cáncer, conocidos como medicamentos biológicos, y que tienen un costo de decenas e incluso cientos de miles de dólares por paciente al año, refiere el diario La Jornada de México en un artículo disponible en su portal web.
Aunque los compuestos biológicos no son patentables en todos los casos, el texto filtrado por Wikileaks, revela que los países firmantes del TPP podrían detener la producción de versiones genéricas de medicamentos biológicos, o biosimilares, para dejar disponibles en el mercado sólo aquellos que cuenten con patente, lo que limita el acceso de miles de pacientes.
Llamado a la razón
Antes de entrar en rigor, el Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica debe ser ratificado por los Parlamentos de cada uno de los estados miembros. Sin embargo el Congreso de Estados Unidos aprobó en junio una ley que le daba autoridad al presidente Obama a negociar por la vía rápida acuerdos comerciales.
De este modo, la Asociación Consumers International llamó a los parlamantarios de los 11 países restantes a velar porque los téminos del TPP no comprometan los intereses y el desarrollo de la sociedad.
"El fin de las negociaciones del Acuerdo de Asociación Transpacífico tras un debate secreto de ocho años, trasladará la discusión de este tratado a los escenarios nacionales, abriendo una gran posibilidad para que los parlamentos, que son los organismos encargados de aprobar o no este acuerdo, aseguren y se comprometan para que el interés público prime por sobre los intereses comerciales", planteó Consumers International en un comunicado.
Oposición en Estados Unidos
El camino para que el tratado impulsado por Obama sea aprobado en Estados Unidos, no está excento de cuestionamientos, incluso por parte de compañeros del Partido Demócrata, como la ex secretaria de Gobierno y pre candidata a la presidencia, Hillary Clinton, quien retiró su apoyo al TPP.
"Por lo que he sabido, al día de hoy, no puedo apoyar este acuerdo", declaró la candidata a las primarias demócratas en un comunicado, reseñado por las agencias de noticias internacionales
Clinton se refirió en particular a la ausencia de sanciones contra los países acusados de manipular su moneda, y las medidas que dan demasiadas ventajas a las compañías farmacéuticas en detrimento de los pacientes y los consumidores.
"Muchas veces, en el curso de los años, no hemos encontrado un buen equilibrio en los acuerdos comerciales. No podemos dar el beneficio de la duda a los nuevos acuerdos. Los riesgos son demasiado elevados y, a pesar de nuestra buena voluntad, terminan por hacer más mal que bien a las familias", cuestionó.
Por su parte,la profesora de Derecho de la Universidad Duke, Rachel Brewster, señaló que los acuerdos regionales como el TPP pueden estimular el comercio en algunas áreas, pero también castigan a las empresas estadounidenses que están fuera del alcance del acuerdo.
Brewster explicó en un comunicado que "Estados Unidos se ve obligado a firmar estos tratados regionales porque las negociaciones comerciales mundiales en la Organización Mundial del Comercio se han estancado durante más de una década, pero estos acuerdos regionales tienen un alto costo".
"Al establecer las preferencias de algunos Estados sobre otros, los beneficios de la liberalización se limitan a los miembros del nuevo grupo y no incluyen a muchos aliados tradicionales de EEUU".
Explicó que para muchas empresas de Estados Unidos los costes de fabricación no subirán pero no van a ver bajas en los niveles arancelarios que sí tendrán los productores de la cadena del Pacífico, y por lo tanto verán afectada su competitividad en el mercado nacional y los mercados globales.
FUENTE: AVN |