El debate en el seno del PSOE entre los que apuestan por evitar la investidura de Mariano Rajoy y los que prefieren la abstención socialista para evitar terceras elecciones toca a su fin. Al menos de momento. En este primer asalto y si las previsiones se confirman este viernes, los primeros impondrán finalmente su postura y el actual presidente en funciones no saldrá investido. Por delante quedarán dos meses en los que se presume que arrecien las presiones al PSOE en general y a Pedro Sánchez en particular para que cambien su voto y desbloquear así la situación política del país.Pero las presiones y disensiones en las filas internas socialistas ya han sido más que evidentes desde las elecciones del 26 de junio. Mientras los miembros más destacados de la Ejecutiva Federal del PSOE amparaban casi sin fisuras el ‘no’ a Rajoy, dirigentes históricos como Felipe González, Josep Borrell, José Bono o José Luis Rodríguez Zapatero se decantaban de forma más o menos clara por evitar a toda costa nuevos comicios electorales.
Entre los barones socialistas, la disparidad de opiniones también es evidente. Gran parte de los presidentes autonómicos son proclives a la abstención, toda vez que el desbloqueo de la situación política permitiría la reactivación de las inversiones del Ejecutivo central hacia las comunidades. Solo Francina Armengol, presidenta de Baleares, se separa de esta línea y es partidaria de intentar un Gobierno alternativo, al igual que otros secretarios generales autonómicos, como el catalán Miquel Iceta. (PULSE AQUÍ PARA VER MÁS)
FUENTE: Daniele Grasso - J. Escudero - http://www.elconfidencial.com
