
Supone una multa récord en un caso de exportación ilegal y surge mientras el gobierno Trump pone en duda sus relaciones comerciales con China, que a su vez ha sido especialmente crítica con la gestión del nuevo presidente del país.
La sanción se produce después de una larga investigación iniciada en el mandato de Obama. La empresa china se ha declarado culpable de exportar miles de equipos de telecomunicaciones fabricados en los Estados Unidos a Irán y Corea del Norte, dos países colocados en la lista negra del país. El grupo también ha admitido que suministró información falsa a las autoridades para ocultar esta malversación de fondos.
ZTE, que ya ha comenzado a pagar 892 millones de dólares, podría pagar una sanción incluso mayor. Durante los próximos siete años estará bajo la amenaza de una pena adicional de 300 millones más si reincide en este tipo de prácticas.
«Hemos advertimos al mundo: se acabaó el juego», ha afirmado el secretario de Comercio Wilbur Ross. «Aquellos que violan las sanciones económicas no quedarán sin castigo y soportarán las peores consecuencias»
No es la primera vez que una compañía extranjera es multada por Estados Unidos por violar las sanciones. En 2014, el banco francés BNP Paribas acordó pagar casi $ 9 mil millones en multas por transacciones ilegales a países como Irán.
FUENTE: Agencias - http://www.finanzas.com