En la mesa se han negociado 141 cláusulas de un total de 155 que contiene el pliego de peticiones, pero las conversaciones están estancadas en 14 cláusulas.
Una vez anunciada la fecha de huelga, los trabajadores tienen cinco días para legalizarla ante el Ministerio de Trabajo (Mitradel). Paralelamente, las reuniones continuarán todos los días en la sede del Mitradel, que funge como mediador. De no lograrse el acuerdo con la Cámara Panameña de la Construcción (CAPAC) antes de la fecha anunciada, el Suntracs hará efectiva la huelga.
Una vez ejecutado el paro de laboral, las empresas suspenderán el pago a los obreros y el sindicato asumirá los salarios con los dineros del fondo de huelga —que aportan los trabajadores— mientras dure el paro, explicó Eduardo Rodríguez, vocero de la CAPAC.
El gremio de la construcción ‘ve muy distante' que lleguen a un acuerdo, ya que de las 14 cláusulas convencionales pendientes hay tres —que no son económicas— y les inquietan, entre ellas las demandas sobre el monto del Impuesto Sobre la Renta, debido a que podrían impactar en el costo de producción de la industria, el valor de las viviendas e incluso la recaudación de impuestos. Este último no tiene relación directa con el gremio.
En la última convención 2014-2017, los grupos acordaron un ajuste salarial de $0.24, es decir un 19% al año, cuando el histórico era de $0.02 o 2%. En esta oportunidad, Suntracs propuso un alza del 100%, que posteriormente ajustó a 60%.
En la convención pasada el sindicato logró un ajuste al salario base para el ayudante general de $771 al mes, mientras que un principiante recibe un salario de $869.
El obrero calificado devenga $1,040 al mes y un obrero calificado especial o —que repella exteriores— gana al mes $1,096, según cifras proporcionadas por la CAPAC.
FUENTE: Mileika Lasso - http://laestrella.com.pa