
Alonso fue el segundo piloto español en ganar las 24 Horas de Le Mans tras lograrlo Marc Gené en 2009. Pero el de Oviedo no ha logrado solo eso. Es nada más y nada menos que campeón del mundo de resistencia junto Kazuki Nakajima, Sebastien Buemi y un equipo como Toyota que no ha tenido rival en toda la temporada. Solo entre los propios prototipos de la marca nipona han tenido lucha. Una batalla que ha durado hasta las segundas 24 Horas de Le Mans y casi hasta la última hora del campeonato cuando el Toyota 7 servía en bandeja el segundo triunfo en Le Mans para Alonso en una carrera que no ha sido nada fácil y que el prototipo del asturiano ha tenido una falta de ritmo alarmante.
Gran inicio del Toyota 7
Mike Conway fue el encargado de defender la pole en los primeros compases e hizo un trabajo perfeco. El británico aguantó la primera plaza de manera extraordinaria ante su gemelo, que prefería evitar problemas. A partir de ahí, Conway empezó a volar para despegarse de Buemi. El Toyota 7 estaba siendo un segundo por vuelta más rápido y su ventaja fue creciendo hasta alcanzar los 46 segundos.
It's #LeMans24 victory for the #8 #TS050 HYBRID! 🏆— TOYOTA GAZOO Racing WEC (@Toyota_Hybrid) June 16, 2019
Dramatic and unexpected end to the race, but it’s a TOYOTA one-two nonetheless. We feel so sorry for our #7 crew, but big congratulations to our new @FIAWEC World Champions and two-time Le Mans winners. 👏 pic.twitter.com/29BvIeEyMt
Alonso se subió al Toyota en ese momento. Tenía intenciones de recortar el tiempo, pero un Full Course Yellow lo dejó a 65 segundos. Tras este contratiempo el asturiano empezó a coger ritmo y bajó la diferencia, pero el piloto español no terminaba de encontrarse cómodo con un prototipo que parecía inferior a su gemelo.
FUENTE: Con información de JONATHAN LLATA - El Confidencial