El diplomático uruguayo venció en el comicio a María Fernanda Espinosa, la candidata ecuatoriana.
Cada candidato a Secretario General necesitaba obtener al menos 18 votos de un total de 34 miembros activos de la OEA para lograr el puesto. Treinta y tres votaron el viernes. La elección ocurrió a pesar del llamado de varios países latinoamericanos a postergar la votación debido a la rápida propagación del coronavirus.
Países como la Argentina y los de la Comunidad del Caribe (CARICOM) expresaron esta semana en cartas estar preocupados por los riesgos a la salud de los diplomáticos que fueran llamados a la reunión en la sede de la OEA en Washington. Portavoces del organismo internacional dijeron que la reunión fue organizada siguiendo estrictamente los parámetros que dictan los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades, conocidos como CDC en los Estados Unidos.
Excanciller de Uruguay bajo el gobierno de José Mujica (2010-2015), Almagro, de 56 años, asumió el puesto en mayo de 2015 por un período de cinco años. Se espera que ahora mantenga su puesto hasta 2025.
Almagro contaba con el apoyo de Washington y de sus principales aliados en el continente americano, entre ellos Colombia y Brasil. A Venezuela la representa en la OEA un embajador designado por la Asamblea Nacional, de mayoría opositora al chavismo. La votación fue secreta aunque en las últimas semanas eran claros los apoyos que recibiría uno y otro postulante.
Respaldo absoluto
Veintisiete ex jefes de Estado y de Gobierno de España y Latinoamérica habían expresado hace dos semanas su apoyo a la reelección del actual secretario general de la OEA. En un comunicado divulgado por la llamada Iniciativa Democrática de España y las Américas (IDEA), los ex líderes elogiaron los esfuerzos de Almagro en denunciar a “aquellos Estados miembros en los que han venido ocurriendo serios quebrantos al orden constitucional y violaciones masivas y sistemáticas de derechos humanos”.
Por tanto, consideraron que su reelección era “crucial para el porvenir de la región en su conjunto (...) y frente a las expectativas de millones de ciudadanos que ansían y merecen el retorno de la democracia a sus países y un futuro de dignidad y bienestar”. El ex canciller uruguayo, que contó con el apoyo de Estados Unidos, defiende un estilo directo y describe al venezolano Maduro como un “dictador con todas las de la ley”, en tanto defiende herramientas polémicas como las sanciones económicas contra Caracas.
El camino de Almagro, de 56 años, se allanó definitivamente luego de la renuncia del peruano Hugo De Zela, un diplomático de 68 años con amplia trayectoria en la OEA, que era postulado por su país. Entre los 27 ex líderes firmantes figuraban José María Aznar, de España; Vicente Fox y Felipe Calderón, de México; Mauricio Macri, de Argentina; Eduardo Frei, de Chile; Ricardo Martinelli y Mireya Moscoso, de Panamá; Julio María Sanguinetti y Luis Alberto Lacalle, de Uruguay; y Andrés Pastrana y César Gaviria, de Colombia.
FUENTE: Con información de Infobae