Nuevas revelaciones en el escándalo de los Panama Papers muestran que el secretario legal y técnico de la Presidencia argentina, Pablo Clusellas, operó como mediador entre su estudio jurídico y la firma Mossack-Fonseca, en Panamá.Así lo reportan este domingo el diario La Nación y los portales de noticia Infonews y Minuto Uno, entre otros medios.
Clusellas, abogado de negocios y amigo de la infancia del presidente Mauricio Macri -coinciden- ofició a través de la firma Romero-Zapiola-Clusellas-Monpelat en la creación de empresas fantasma a través de la firma panameña especializada en crear sociedades offshore alrededor del mundo.
Clusellas ingresó a la actividad pública en 2007 de la mano de su amigo y líder del PRO, Mauricio Macri, y en 2010 ocupó interinamente el despacho de la Secretaría de Comunicación, luego de la muerte de Gregorio Centurión.
La Presidencia sostiene que se desprendió del estudio jurídico en 2007 cuando asumió el mismo cargo que tiene ahora a nivel de Nación en la administración de Macri cuando fue gobernador de la Ciudad de Buenos Aires. La Nación dice que operó como mediador hasta 2008.
Pero Minuto Uno señala que en su declaración jurada de 2014 el funcionario declaró poseer el 1 por ciento de las acciones del estudio jurídico.
Incluso, en los registros públicos de la sociedad figuró con cargo ejecutivo dentro del estudio hasta 2009, agrega Infonews.
La nueva revelación amplía la lista de funcionarios del actual gobierno argentino y de personas en el entorno del Presidente, ya sean familiares o miembros importantes de su partido Propuesta Republicana, implicados en el escándalo de las empresas fantasmas.
El estudio jurídico que integró Clusellas aparece catalogado como intermediario, lo que significa que desde Mossack Fonseca lo utilizaban como nexo con los verdaderos dueños de las sociedades offshore y para que organicen la estructura jurídica y contable de las inversiones.
El asesor y amigo del mandatario fue acusado por el legislador Gustavo Vera en 2007 por dirigir la empresa Le Coq Sportif que utilizaba servicios de talleres clandestinos.
De acuerdo a la investigación de Gustavo Vera, titular de la ONG La Alameda, el funcionario -que antes se desempeñó en igual cargo pero en la órbita de la Ciudad – era director titular de Le Coq Sportif, una empresa cuestionada por utilizar los servicios de talleres clandestinos para la confección de indumentaria.
Entre las pruebas del vínculo del Secretario Legal y Técnico con la compañía acusada de contratar talleres en los que se verificó la existencia de trabajo esclavo, resultó coincidente la dirección fiscal de Le Coq Sportif con los domicilios de varias empresas de las que Clusellas también era parte integrante de sus sociedades o directorios.
Desde La Alameda denunciaron también que, en virtud de este vínculo, no habían existido inspecciones en los talleres contratados por Le Coq Sportif.
FUENTE: Prensa Latina - Agencias
