Ella fue golpeada en reiteradas oportunidades, y el lunes logró filmar la última embestida, con lo que pudo probar la demanda. El acusado renunció al cargo, aparentemente, “para resolver problemas personales” y dijo que “todo fue un malentendido”. Los ataques físicos y verbales se produjeron en instalaciones de la Gobernación, la mayoría de las veces en la oficina de Cuadros.
La golpiza grabada comenzó con una discusión. Él se acercó a la coordinadora de la repartición, la golpeó, la zarandeó y luego de agarrarla por los cabellos, la tiró al piso. El llanto y los pedidos de auxilio no fueron escuchados, y éste siguió gritando y amenazando a la funcionaria. Por las lesiones que sufrió en la acometida tuvo cinco días de impedimento.
“Me arrojaba con alguna cosa si estaba cerca de él; si decía algo que no le gustaba, me pellizcaba, me pisaba, me pateaba, aun si había gente cerca, pero ésta no se daba cuenta. Cuando estábamos a solas era mucho más grave, eran puñetes en el estómago, me jalaba los cabellos y me daba bofetadas”, denunció J.R. ante la Fiscalía.
Además le llamaba “imbécil” y le decía: “Estoy harto de ver tu cara de estúpida”, y constantemente “utilizaba la frase ‘te voy a domesticar porque eres rebelde, no mereces una paliza, sino varias hasta que se acabe tu rebeldía’”.
Ayer, Cuadros renunció al cargo. “Es de nuestro conocimiento, pero está en la Justicia Ordinaria. En cuanto a las faltas cometidas dentro de la institución, es obvio que no se pueden dar y por eso corresponde un proceso sumario en su contra”, explicó el asesor general de la Gobernación, Freddy San Millán.
FUENTE: La Razón / A. Melgarejo - http://www.la-razon.com |