Scarano se encuentra en arresto domiciliario en Salerno, en el sur de Italia, fruto de la investigación que tiene abierta la Fiscalía de Roma desde el año pasado.
Se le acusa de conspirar para la entrada ilegal en Italia de 20 millones de euros procedentes de Suiza para unos amigos constructores de barcos en Salerno, reseñó el portal www.publico.es.
Este prelado era responsable del servicio de contabilidad de la Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica (Apsa), y junto a él también fue detenido un párroco de Salern Luigi Noli.
De acuerdo con las investigaciones, Scarano se ocupaba de una amplia red de blanqueo de dinero que hacía pasar por falsas donaciones para los más necesitados y que acababan en las cuentas del banco del Vaticano.
La Guardia de Finanzas -policía financiera italiana- ha procedido a confiscar bienes inmuebles y cuentas corrientes, por cerca de 6 millones de euros en bancos italianos.
FUENTE: AVN |