El último caso ocurrió el viernes pasado, cuando una mexicana de 20 años de edad pretendió viajar con 3.155 gramos de cocaína ocultos en su maleta, pero fue detectada por perros antinarcóticos en el aeropuerto Palonegro de Bucaramanga.
Con este caso son siete los extranjeros que en el último año han sido capturados en ese aeropuerto intentando viajar a Panamá con cocaína escondida en sus equipajes.
En el 2014, según datos de la Policía, fueron detenidos en la terminal aérea tres mexicanos, un hondureño, un panameño y un visitante de las Bahamas que intentaron salir del país con 14,8 kilos de clorhidrato de cocaína.
La cocaína proviene de los cultivos ilegales que los grupos armados ilegales mantienen en el Catatumbo, en la frontera con Venezuela, y en el sur de Bolívar.
Según un investigador que solicitó reserva del nombre, detrás de los envíos de esos correos humanos estarían las bandas criminales de ‘los Rastrojos’ y ‘los Urabeños’, que habrían cambiado a los colombianos por extranjeros que ingresan al país como turistas y comerciantes.
En el 2013 fueron detenidas en los aeropuertos de Bucaramanga y Cúcuta 11 personas que en maletas de doble fondo, en sus estómagos o en productos como tomates, pistacho y licor pretendieron sacar del país más de 34 kilos de cocaína.
Las bandas criminales, que tendrían negocios con carteles mexicanos, ofrecen a sus correos hasta 1.000 dólares (2,3 millones de pesos) por un kilo ‘coronado’ (entregado en Ciudad de Panamá).
Ese kilo de cocaína, que en el Catatumbo se comercializa entre 2 y 3 millones de pesos, dependiendo de la pureza, cuesta en las calles de Estados Unidos entre 25.000 y 30.000 dólares (entre 60 y 72 millones de pesos).
El atractivo que tiene Panamá para los narcotraficantes, según el investigador, es porque de allí hay conexiones aéreas con el resto del mundo. “De Panamá salen muchos vuelos con conexiones internacionales en terminales aéreas donde no es tan minuciosa la requisa”, aseguró.
Las autoridades antinarcóticos también consideran que en los vuelos de regreso (Panamá-Bucaramanga y Panamá-Cúcuta) pueden estar ingresando de manera ilegal dólares.
Esos indicios se originaron en septiembre del 2012, cuando en el aeropuerto de Palonegro fueron capturados dos hombres, ambos de Cúcuta, que ingresaron al país con 116 cápsulas de látex en sus estómagos que contenían 103.200 dólares, más de 197 millones de pesos (al cambio de la época).
Al parecer, tres personas más, que fueron detenidas, iban a asesinar a los viajeros para sacarles de sus estómagos el dinero. Igualmente, detrás de estos correos con dólares estarían las bandas criminales.
Sobre esta situación, Wílfredo Cañizares, director de la Ong Fundación Progresar, dijo: “En menos de una hora se pueden ‘blanquear’ fácilmente millones de dólares y euros por todas las vías ilegales que hay en Cúcuta”, debido a la informalidad en el manejo de las divisas y monedas extranjeras que se presenta en la ciudad.
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