
Este periódico asegura que los militantes "se asustaron" por la presencia del grupo de combate del buque de Rusia en el Mediterráneo oriental y su disposición a hostigar sus posiciones con los misiles de crucero Kalibr-NK, instalados en varios buques de la flota rusa.
A pesar de que las Fuerzas Aéreas de Rusia y Siria suspendieron sus ataques a las posiciones yihadistas en la ciudad, "se podría constatar que los terroristas están seriamente desmoralizados" y buscan maneras de salvarse, señala la fuente de 'Izvestia'.
Por su parte, el politólogo sirio Hasan Hasan estima que los terroristas se inclinan a negociar porque Occidente "es consciente de su incapacidad para apoyar a sus 'protegidos'".
FUENTE: Actualidad RT