Si bien en un principio se especuló con que abandonaba el cargo por motivos personales, en su carta de renuncia, que fue divulgada por la CNN un día después de que estallara la noticia, Feeley expresaba que su marcha se debía a que no podía ejercer su cargo de manera "apolítica".
"Fue el Gobierno el que filtró mi carta de renuncia. Yo nunca quise que fuera un asunto público", protestó Feeley.
El exembajador, que dijo amar su carrera, confesó que las políticas de la actual Administración, en especial en materia migratoria, le resultan "antiestadounidenses" puesto que, según dijo, "Estados Unidos es un país de inmigrantes".
"Yo quería continuar", aseguró Feeley, quien afirmó que se sintió "obligado" a renunciar al ver cómo la Casa Blanca "criminalizaba" a los inmigrantes que entran irregularmente en el país y que, en su mayoría, proceden de Latinoamérica.
Por este motivo, tras "asegurar una transición suave", el pasado viernes Feeley cedió su puesto a Roxanne Cabral, quien asumió el liderazgo de la diplomacia estadounidense en Panamá como encargada de negocios interina de la misión diplomática norteamericana.
FUENTE: EFE - http://laestrella.com.pa