Este año, Madrid recibe a un buen número de nuevos locales, con propuestas de todo tipo, desde mediterráneas a asiáticas, pero con un denominador común, la gente empieza a hablar de ellos y las redes sociales comienzan a llenarse de fotos de sus vistosos platos; es decir, se ha puesto en marcha lo que en el siglo XX llamábamos el 'boca a boca', la recomendación más fiable, la que mejor funciona. Entre los restaurantes recién llegados, los siguientes están ya en boca de los 'foodies' madrileños más avezados...
Sinsombrero
Ocupando el espacio de la antigua Nicoletta, en el paseo de la Castellana, 4, encontramos ahora este enorme restaurante con distintos espacios y una espectacular barra semicircular que simula el estilo de los clubes de los años 20 del siglo pasado. Todo el mundo quiere hacerse fotos en ella por su espléndida decoración, pero también probar sus platos, a cargo de Pedro Gallego y con Javier Goya como asesor gastronómico.
Productos de temporada y elaboraciones sencillas, pero que pretenden ser también sorprendentes. En su carta conviven los entrantes de toda la vida, como las croquetas de jamón o la ensaladilla rusa, con chuletones y solomillos de rubia gallega a la brasa y, para los más atrevidos, el Tomahawk (un filete grueso con su costilla incluida). Los guisos también son especialidad de la casa, desde un codillo con cerveza negra hasta el rabo de vaca al vino tinto.
Acento cantonés
Este pequeño restaurante en la calle Álamo, 8, es perfecto para conocer de primera mano la esencia de la cocina cantonesa, bastante alejada de lo conocemos como 'comida china'. Atiende a no más de veinte personas a la vez y así el trato es absolutamente personalizado. Yinyin Deng, una de los tres socios, realiza un auténtico 'briefing' a los comensales, hablándoles de la cultura de esta región al sur de China y recomendando sus recetas caseras.
Destacan en su carta los dim sum artesanos (bocados con diferentes rellenos de carne y verduras), así como los platos que tienen como base el arroz, tanto en sopas como en rollitos tipo crepe. No encontraremos fritos ni picantes en este local y sí cocina ligera, ya que se realiza fundamentalmente al vapor. Merece la pena saborearla con una buena cerveza Tsingtao y dejar espacio para los postres, en forma de cremas y de gelatinas, suaves y nada empalagosos.
FUENTE: Con información de Sandra Sánchez - https://www.alimente.elconfidencial.com - ->> Ir