La boda de Sergio Ramos y Pilar Rubio está dando mucho que hablar. Principalmente por el secretismo que la rodea, pero también por los excesos económicos que la caracterizan. El capitán del Real Madrid no ha reparado en gastos para el que espera sea un día inolvidable para él y los suyos, pero, paradójicamente, lo que le va a salir más económico es casarse en la catedral de Sevilla.La de la ciudad hispalense es la catedral gótica más grande del mundo (11.520 metros cuadrados), superada solo por la basílica de Nuestra Señora Aparecida en Brasil (18.000 metros cuadrados) y la iglesia de San Pedro, en El Vaticano (20.139 metros cuadrados). Nombrada por la Unesco en 1987 Patrimonio de la Humanidad, junto al alcázar y el Archivo de Indias, conforma un conjunto histórico que es uno de los grandes atractivos culturales y turísticos de Sevilla.
Casarse en la Capilla Real de la catedral de Sevilla, sin embargo, puede estar al alcance de cualquier bolsillo y cualquier persona. Sergio ha seguido el trámite rutinario, que es pedir cita un año antes, cuando se abre el libro de matrimonios, y consultar la disponibilidad. La fecha estaba libre y casarse allí, en la Capilla Real, cuesta 175 euros, incluyendo las flores que ese día decoren el altar. Los novios también disponen de la opción de hacer ellos su propio adorno floral y, en este caso, es lo que harán.
La boda no se celebrará en el altar mayor, ya que este lugar está reservado solo para bodas reales. A lo largo de la historia cuatro han sido las bodas que se han celebrado allí: la primera fue la de doña Esperanza de Borbón (tía materna del rey Juan Carlos) y don Pedro de Orleans; en 1947 se casó allí la duquesa de Alba, en primeras nupcias, con Luis Martínez de Irujo; en 1988 se casaban el entonces duque de Húescar (hoy duque de Alba) con Matilde Solís y la última la de la infanta Elena y Jaime Marichalar en 1995. ->>Vea más...
FUENTE: Con información de CORAL CASERO - El Confidencial
