"Hay cosas que insultan a la inteligencia. ¿Qué dice el señor Iglesias? Algo bien interesante a un partido que, cuando ha gobernado, nunca ha gobernado con el PP. Y este hombre, que lleva cinco años de vida, ha votado cuatro veces contra el PSOE. Le escucho decir que tiene que impedir la gran coalición. Yo le voy a lanzar a él y a todos los votantes progresistas de España un compromiso, y ya sabéis que yo, cuando digo las cosas, las cumplo: nosotros no vamos a hacer una gran coalición con el PP. Ninguna. Ese es el compromiso del PSOE". Sánchez dejaba eso dicho en el pórtico de la campaña del 10-N. En Vitoria, en su primer acto tras la apertura, en la noche del jueves, en Sevilla. El de Euskadi fue un mitin pequeño, un desayuno con la militancia, pero en él quiso ya marcar el día y devolver la pelota a su principal rival por la izquierda, que según las encuestas resiste mucho mejor de lo esperado por los estrategas socialistas. Sus manifestaciones fueron replicadas por los medios —y eso que era el primer mitin de este viernes, antes del paseo por Logroño y el acto de Pamplona de la tarde— y provocaron la inmediata respuesta de sus rivales.
En realidad, nunca Sánchez manifestó su deseo de armar un acuerdo de gobierno con el PP. De hecho, en las últimas semanas no hacía más que quejarse del "trampantojo" agitado por Iglesias, pero este viernes fue aún más claro. Porque el jefe de Podemos sigue insistiendo, mitin tras mitin, entrevista tras entrevista, en que el presidente quiere realmente pactar con los conservadores, y la única forma de impedirlo es fortaleciendo a los morados. A mayor representación de UP, repite Iglesias, menos tentaciones tendrá el PSOE de entenderse con la derecha. Anoche mismo machacó esa misma idea en una entrevista en 'El hormiguero' (Antena 3), en horario de máxima audiencia. ->>Vea más...
FUENTE: Con información de Actualidad RT