La constructora se adjudicó estas dos infraestructuras, conocidas como Vía Brasil I y Vía Brasil II, en el año 2011. Sólo uno de los tramos terminó con un sobrecoste de 36 millones de euros, según las autoridades panameñas. Los viales se suman al grupo de obras presuntamente amañadas por FCC en ese país mediante el pago de comisiones que sumarían 82,7 millones de dólares (73,6 millones de euros al cambio actual), a través de un complejo entramado societario con ramificaciones en Uruguay, Andorra y Suiza. Los fondos acabaron en mercantiles del abogado local Mauricio Cort, presunto testaferro del presidente del país entre 2009 y 2014, Ricardo Martinelli.
Las pesquisas están más avanzadas en el caso de otros proyectos bajo sospecha, como las líneas 1 y 2 del metro de Panamá y la Ciudad Hospitalaria de Clayton. En el suburbano, FCC participó con un 45% del consorcio constructor. El 55% restante estaba en manos de la brasileña Odebrecht, epicentro del mayor escándalo de corrupción de la historia de América. Las líneas fueran adjudicadas (la primera en 2010 y la segunda en 2015) con un precio total de 3.957 millones de euros. En el caso de la Ciudad Hospitalaria, FCC logró el contrato en solitario en 2011 con una oferta de 440 millones de euros.
La compañía se ha visto obligada a admitir a la Fiscalía, mediante dos autodenuncias formuladas los pasados 31 de mayo y 6 de junio, que logró esos encargos comprando a Martinelli. No solo con el pago de comisiones. De las pesquisas, se desprende que FCC también entregó al expresidente panameño una participación del 50% en la sociedad Altos del Javier SA, una mercantil constituida por la constructora en 2011 y que desde entonces ha permanecido bajo el paraguas de su patrimonial Participaciones Teide SA.
FUENTE: Con información de JOSÉ MARÍA OLMO - El Confidencial