La rúbrica se realizó durante la cumbre bilateral que tiene lugar en la ciudad de Lyon, ubicada en el este del país galo, donde numerosos grupos opositores al proyecto de ambos lados de la frontera se congregaron para realizar una manifestación.
El plan de la gigantesca obra para unir Lyon y Turín por vía férrea se discute desde 2001 y contempla la construcción de un túnel de 57 kilómetros de largo, equipado con alta tecnología.
De acuerdo con las autoridades franco-italianas, la nueva vía tendrá una utilidad pública porque permitirá aliviar el tráfico terrestre en los Alpes y disminuir la contaminación ambiental ocasionada sobre todo por los camiones de carga.
Además, reducirá en la mitad el tiempo necesario para hacer el trayecto y se duplicará la capacidad de transporte de mercancías en ambas direcciones.
Los adversarios señalan, sin embargo, que si bien disminuirá la polución en los alrededores de las autopistas, las grandes obras acometidas y la perforación bajo las montañas, donde hay minerales peligrosos como el amianto o asbesto, tendrán un fuerte impacto negativo en el medio ambiente.
También denuncian que las proyecciones de crecimiento del tráfico pesado por carretera son incorrectas y en realidad la tendencia apunta hacia una reducción y no al aumento del flujo de camiones de carga.
La coordinadora de oposición a esta obra, propone que en lugar de construir la vía férrea se mejoren los puertos en el mediterráneo para realizar por allí el trasiego de mercancías.
Otro inconveniente es el alto precio del plan, calculado inicialmente en 25 mil millones de euros, muy difíciles de reunir en las actuales condiciones de la economía en la Unión Europea.
Al principio se contó con que el 40 por ciento de ese costo saldría de los fondos comunitarios, pero las reducciones al presupuesto del bloque para el período 2014-2020, impulsadas por Alemania y Reino Unido, hacen casi imposible esa aspiración.
La misma Corte de Cuentas de Francia expresó en fecha reciente sus dudas sobre la viabilidad económica y la rentabilidad del proyecto.
Entre los temas de la agenda en la reunión de Hollande y Monti figura el análisis de cómo obtener los recursos financieros para echar a andar el plan, que debe estar concluido en 2028.
FUENTE: Prensa Latina |