Berlusconi, quien ya fue sentenciado el pasado 24 de junio a siete años de cárcel por incitación a la prostitución de menores y a inhabilitación política permanente por abuso de poder, podría volver ante el estrado, ahora por el llamado caso Ruby Ter.
El procurador de Milán, Edmondo Bruti Liberti, informó que en total son 45 las personas investigadas, luego de la presentación de consideraciones en noviembre último para abrir un nuevo proceso contra el multimillonario italiano.
Para esta ocasión, se unen a las acusados los abogados de Il Cavaliere, como también se lo conoce al magnate mediático, Niccolo Ghedino y Piero Longo, quienes habrían arreglado testimonios de varias jóvenes, incluida la marroquí Karima El Marough, apodada Ruby.
En dos procesos separados anteriores, conocidos como caso Ruby, contra Berlusconi y sus allegados, se acusó al primero de mantener relaciones sexuales pagadas con Marough, cuando ésta aún no llegaba a la edad de 18 años, en su residencia de Arcore, cerca de Milán.
La otra acusación estaba relacionada con una llamada telefónica realizada por el multimillonario, cuando aún dirigía el Ejecutivo en mayo de 2006, a una comisaria para liberar a la joven marroquí, quien fue arrestada por robo.
La fiscalía centra sus nuevas acusaciones en lo ocurrido en una reunión en enero de 2011 en la mansión de Arcore, donde los abogados de Berlusconi dialogaron con varias jóvenes, luego que la policía registró sus viviendas.
A partir de la mencionada cita, las muchachas, frecuentes invitadas a fiestas de placer por el exprimer ministro, comenzaron a recibir dos mil 500 euros mensuales, destaca la prensa local.
En el segundo proceso relacionado con el caso Ruby, Lela Mora, Emilio Fede y Nicole Minetti, todos allegados de Berlusconi, fueron condenados a cinco y siete años de cárcel por incitación a la prostitución infantil y proxenetismo.
Al conocer su fichaje para otro proceso judicial, Il Cavaliere retomó sus conocidos argumentos de que la magistratura en los últimos 20 años abre procesos politizados contra él como parte de los propósitos de ese órgano de tomar el poder en Italia.
Los intentos del magnate mediático de buscar vías para garantizar su impunidad y evitar la justicia en más de una docena de juicios anteriores llevó a la caída de al menos un gobierno y a crisis políticas que requirieron la celebración de comicios generales.
En noviembre pasado, el Senado aprobó la expulsión de Berlusconi, a quien en agosto último se le confirmó una condena de cuatro años de cárcel por fraude fiscal en el caso de Mediaset, una empresa de su familia distribuidora de material fílmico en el país.
FUENTE: Prensa Latina |