Rafael Correa llegó al poder en enero del 2007 y fue nuevamente elegido en el 2009, en comicios generales anticipados dispuestos por una asamblea constituyente que reformó la Carta Política en el 2008 y aprobó la reelección inmediata de autoridades de elección popular, por un periodo adicional.
En el 2013 volvió a ganar la presidencia por cuatro años más, y en múltiples ocasiones advirtió de su retiro de la vida política.
Sin embargo, el mandatario anunció el sábado la posibilidad de lanzarse a la reelección en el 2017, y con su anunció consolidó la posición de su partido, Alianza País (AP), de impulsar una enmienda constitucional que permita ese tercer mandato.
“Nosotros hemos planteado, no ahora sino desde siempre, la posibilidad de que el mandatario vuelva a las urnas por la presidencia de la República”, afirmó la presidenta de la Asamblea Nacional, Gabriela Rivadeneira.
El anuncio se da a menos de una semana de realizadas las elecciones seccionales en Ecuador, en las que AP logró una mayoría de autoridades locales a nivel nacional, pero perdió cuatro de las alcaldías más importantes del país, consideradas un fortín del oficialismo. (Lea también: Una dolorosa derrota para Rafael Correa en las municipales de Ecuador).
Para Correa, la pérdida en Quito es un triunfo de la derecha y por eso considera necesario “revisar” su participación electoral “porque todavía queda mucho por hacer para que este proceso (de revolución ciudadana) sea irreversible y podamos dejar a nuestros hijos (...) un país sin los poderes de siempre acechando para volver a dominarnos”.
“Creo que es mi deber revisar la sincera decisión que tomé de no lanzarme a la reelección”, dijo en su última cadena sabatina.
“En Ecuador se deja ver una “derecha distinta (...), con estrategia de poder, con relaciones internacionales, en un marco claro de ofensiva imperialista contra los gobiernos progresistas de América Latina”, resaltó.
FUENTE: MAGGY AYALA SAMANIEGO - http://www.eltiempo.com |