
“No tendré nunca con qué pagarle lo que hizo por mi papá", dice Lucía Herrera, familiar de un venezolano fallecido en Colombia.
Y es que Sonia, que vive en La Guajira, se ha convertido en toda una figura para esos ciudadanos que escapan de su país. Ella mueve cielo y tierra para que los migrantes caídos descansen en paz.
"Se ha incrementado la muerte de estos hermanos del país de Venezuela, darles una digna sepultura, pienso que es cumplir con una ley divina", reflexiona.
Ley que cumple en ‘Gente como uno’, un cementerio donde hay 36 venezolanos.
Sonia Bermúdez asegura que no tiene pactos con ningún ser del más allá; eso sí, sus problemas se los cuenta a los muertos.
FUENTE: Agencias