
Después de cinco años alcistas, el mercado inmobiliario parece mostrar los primeros síntomas de agotamiento en aquellas zonas donde antes se inició la recuperación. El primero en mostrarlo ha sido Barcelona, con una menor subida de los precios de venta y de los alquileres y una menor presencia de los inversores en las transacciones. Un incipiente cambio de tendencia que podría estar trasladándose hacia otra de las locomotoras del sector: Madrid.
Desde Engel & Völkers, no obstante, señalan que a pesar de la ralentización de la actividad en la recta final de 2018 y los primeros meses de 2019, la recta final del año será más fuerte. "Durante los últimos meses de 2018 se ha producido una estabilización de los precios y no se observan caídas por lo que lo lógico es que la demanda de vivienda por parte de los particulares que buscan una casa en la que vivir vuelva a comprar.", explica Óscar Larrea, director general del Metropolitan Market Center (MMC)
En su opinión, "la mejora de la economía y el interés inversor en un entorno de tipos de interés en mínimos han dibujado un escenario positivo para el sector inmobiliario madrileño en los últimos años cuya consolidación ha tenido lugar en 2018. Éste va a ser un año más de transición y estabilidad en cuanto a precios y transacciones". ->>Vea más...
FUENTE: Con información de E.S. - El Confidencial