
La irrupción de la campaña electoral de las municipales, autonómicas y europeas enturbia las negociaciones, que, según vaticinaba el propio Iglesias tras telefonear a Pedro Sánchez, tanto para felicitarle por los resultados como para tenderle la mano de cara a explorar un Gobierno conjunto, serán largas y se llevarán con discreción. Tanto es así que las negociaciones serían multinivel y no acabarían de encarrilarse hasta que se conozca el nuevo mapa de la gobernabilidad en todas las instituciones. La vicepresidenta, Carmen Calvo, afirmaba también que lo más probable será que no haya Gobierno hasta después del 26-M.
Frente a las intenciones manifestadas desde el PSOE de gobernar en solitario, fuentes cercanas a la dirección del partido liderado por Pablo Iglesias defienden la necesidad de un Gobierno "estable" y, para ello, "habrá que hacer pactos entre fuerzas políticas diferentes". Pactos que, según insisten estas mismas fuentes, no se limitan solo al Gobierno de España sino también a las comunidades autónomas y municipios. "España dice que hay que ponerse de acuerdo y que haya gobiernos multicolor", concluyen.
El proceso de negociaciones para la Generalitat valenciana, donde han vuelto a sumar PSPV, Compromís y Unidas Podemos, ofrecerá algunas claves. La formación morada, que firmó el pacto de Botànic en la anterior legislatura, pero sin entrar a formar parte del Consell, apuesta ahora por tener presencia en el Gobierno autonómico. Ximo Puig ya se mostraba dispuesto este lunes a dar cabida a todas las sensibilidades, anunciando que el pacto de progreso tendrá "tonalidades diferentes" al dar cabida a Podemos, pero sin variar su rumbo. Un movimiento rápido, con las cartas boca arriba, que marca terreno frente a posibles injerencias de las direcciones estatales de los partidos, subrayando también que "lo fundamental es un Gobierno que genere estabilidad para que no haya ninguna situación de inestabilidad". ->>Vea más...
FUENTE: Con información de IVÁN GIL - El Confidencial