Algunos de los colaboradores de la sección de décimas decidieron espontáneamente rendir un cariñoso homenaje a Antonio Caballero, su vecino de columna. Una décima de Víctor Mallarino y otra de don Luis de la Vaina y sendos sonetos de Ángel Marcel y Beatriz Ordóñez constituyen el descanse-en-paz de los versificadores de Los Danieles.
Retrato a lápiz
Lo tentó más de un demonio:
fama, posición dinero…
Pero no transó, fue austero:
no negoció el testimonio.
Nos dejó de patrimonio
su trazo preciso y recto,
mordaz, agudo, insurrecto;
nada quedó entre el tintero.
Recuerdo su hablar torero
y pienso: nadie es perfecto.
Víctor Mallarino
Mamando gallo en el cielo
Largose, pues, Caballero
y nos dejó en esta selva
a la cual no creo que vuelva
si no se aburre primero.
Voy a serles muy sincero:
quizás no se fue al infierno
y hoy ejerce de ángel tierno.
Cuando pienso en su persona
oigo su voz socarrona
¡molestando al Padre Eterno!
Luis de la Vaina