"El registro del señor Salvadó fue espectacular en cuanto a documentación: aduanas, catastro...", empezó diciendo, levantando ya la expectación. Según explicó, había una preocupación muy grande en cuanto a la financiación: "Una vez se declarase la independencia, cómo podían sobrevivir....". El trabajo se dividió en dos: el vicepresidente actual, Pere Aragonès, buscaba financiación internacional y la creación de un banco central de Cataluña, mientras que Salvadó se ocupaba de la gestión interna de impuestos.
Para ello, tenían preparado un programa informático, encargado a IBM: "Ahí había una factura de 240.000 euros en que se hablaba de él". Necesitaban 4.500 millones de euros de este programa y una inyección posterior más grande. Entre la documentación de Salvadó, se encontró también un correo electrónico en un 'pendrive', sin remitente, solo copiado el texto, que hablaba de que pedían 11.000 millones de euros de financiación a China. También contaban con 6.000 millones de ingresos de ayuntamientos y 1.300 millones de impuestos propios.
El cabo recordó un inventario valorando bienes inmuebles, activos y pasivos a repartir. También había un viaje a Eslovenia de Pere Aragonès, visita que se reflejaba en un documento con el membrete de la Generalitat, de la Conselleria de Economía, en el que constaba una hoja de ruta que ponía 'independencia de Eslovenia' y hacía una comparativa. "Yugoslavia era una federación en colapso y España, no. España es un país mucho más poderoso", sostenía el informe. ->>Vea más...
FUENTE: Con información de El Confidencial