Para muestra un botón: el primer programa de 'La isla de las tentaciones', en la franja infantil (niños de 4-12 años) tuvo una cuota de pantalla del 15,4% en Cuatro y del 25,5% en Telecinco. Durante el transcurso del resto de las galas el crecimiento ha sido exponencial hasta llegar al 37,3% de share infantil en el octavo programa emitido en Cuatro.
Ante estos datos, Javier Urra, psicólogo y primer Defensor del Menor en España, lanza ciertos interrogantes al aire. ¿Esos menores están solos viendo la tele o con un adulto? ¿Qué le aporta ese programa al niño a nivel formativo y madurativo? ¿Qué tipo de distorsión puede generar este programa a esos menores? "Yo, simplemente me quedaría con los interrogantes, los lanzo y te dejo a ti el análisis", explica el autor de libros como 'El pequeño dictador', 'Déjale crecer: o tu hijo en lugar de un árbol fuerte será un bonsái' y 'La Triple E: escala de estabilidad emocional'.
Para analizar estas cifras, de cualquier modo exorbitantes, resulta necesario ponerlas en contexto. Ese 37,5% máximo (hasta la fecha) significa que de cada 100 niños españoles insomnes, 37,5 están pendientes de los escarceos de Estefanía y de los gimoteos de Christofer, en resumen, casi 90.000 menores pendientes de los juegos de seducción, los problemas de cinco parejas separadas y obligadas a convivir con tentadores que seducen al otro sexo apelando a los instintos más básicos, a esos que van directos al cerebro reptiliano, el que se encarga de controlar los comportamientos instintivos y que se centra en las actividades más básicas de la supervivencia incluidas la agresividad, la dominación, la territorialidad y los rituales. ->>Vea más...
FUENTE: Con información de MILAGROS MARTÍN-LUNAS - El Confidencial